La secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha asegurado este lunes que los republicanos quieren formar un gobierno «cuanto antes mejor» y por eso pretenden iniciar de forma inminente las negociaciones para hacer posible su propuesta de un Govern amplio que incluya a «independentistas y soberanistas», es decir, con Junts y CUP, pero también a ECP.
No obstante, este proyecto de gobierno amplio choca con la negativa en principio de ECP a sumarse a un gobierno con Junts.
«No podemos perder ni un minuto más», ha sostenido en rueda de prensa telemática, en la que ha defendido la necesidad de formar un Govern lo antes posible y ha reivindicado que debe ser liderado por los republicanos, ya que cree que el independentismo de izquierdas ha vencido en las elecciones del 14 de febrero.
Vilalta ha explicado que este lunes ERC está celebrando reuniones internas para acabar de tejer la estrategia y los equipos negociadores, y que «inmediatamente» comenzará a contactar con las formaciones para iniciar las negociaciones.
UP tienen la excusa perfecta «para no juntarse con separatistas», cosa que sentaría bastante mal entre su electorado españolista, procedente tanto de IU como el desencantado del PSOE procedente del 15-m.
No obstante, la tendencia de pérdida de voto por parte de UP no tiene tanto que ver con lo que dice o hace, si no más bien a una conjunción de negativismo de marca difundida por los medios de comunicación, tanto de la derecha como del PSOE. A esto habría que sumar que el votante no españolista de las diferentes confluencias, que ya no quería ver al PSOE ni en pintura, está volviendo a lo que votaba antes de aparecer Podemos, y vuelve no porque la política territorial de Podemos sea equivocada si no por su pacto estatal con el PSOE, un partido al que esos votantes consideran corrupto, monárquico, y amigacho del establishment.