Poco más de tres meses desde que Macron accediera a la Presidencia de Francia las encuestadoras empiezan a reflejar un sorprendente desgaste en la confianza pública hacia su figura que no tiene precedentes en la historia reciente francesa.
Concretamente IFOP apunta a una brusca caída de 10 puntos de confianza en el último mes, quedando apenas por encima del 50% de aprobación, superando en rechazo a Hollande y Sarkozy en sus primeros meses de mandato.
La comparativa ampliada con respecto a los grandes Presidentes de la República de los últimos tiempos deja a Macron en la parte media de la tabla, si bien es quien ha experimentado una caída en la aprobación mayor entre el segundo y tercer mes.
Mientras tanto la segunda fuerza política de las Presidenciales, el Frente Nacional de Le Pen se está preparando para dar una imagen que asuste menos al electorado y que muestre una alternativa real de Gobierno a los partidos tradicionales, con la vista puesta en las próximas elecciones.
Durante estos días se está celebrando el Comité del partido en el que dos corrientes internas se enfrentan para decidir hacia donde enfocar su estrategia política para los próximos años.
Mientras una vertiente apoya que insinuar un apoyo a la retirada de Francia del euro fue lo que causó el rechazo de los electores, la otra cree que fijar una posición antieuropeista podría hacerles transversales y atraer votantes de izquierda, centro y derecha descontentos con Macron.
De lo que acuerden en el Frente Nacional dependerá su futuro político a corto plazo, lo que unido a una crisis institucional y los escándalos de dimisiones ministeriales o el desencuentro que vivió Macron con el Jefe del Estado Mayor por los recortes en gasto militar (que acabó dimitiendo) podría llevarles al Elíseo en 2022.
Ojo, la legislatura acaba de empezar y ya quieren cargarse a Macron.
PD: Pues si el FN se empieza a preparar ya para las elecciones… En 5 años sí que se va a preparar sí.