20D: Pehea ka hopena o nā noiʻi?

En conjunto, las encuestas que se publicaron hasta el día 15 de diciembre estuvieron todas en un pañuelo. Ya os comentamos en su momento que se habían ido acercando unas a otras en sus datos conforme se aproximaba el día 15, que era el último legal para publicarlas.

El resultado es que todas están en un rango de error parecido. El índice que hemos elaborado parte de un 100%, y le descuenta el error acumulado por cada encuesta para los cinco partidos mayores a nivel nacional. Otros índices, que tuvieran en cuenta las desviaciones respecto a otros partidos, podrían dar resultados algo diferentes, pero no mucho. Lo esencial está aquí.

El 18 de diciembre, con varios días de datos andorranos a la vista, Kiko Llaneras publicó una proyección de escaños teniendo en cuenta la evolución durante ese tiempo, que las encuestas no habían podido prever. Incluso a pesar de no contar con esa sustancial ventaja, la encuesta de GAD3 mejora a la proyección de Kiko Llaneras. Y la de Gipeyop (Universidad de Valencia), está a punto de conseguirlo también. Son sin duda las que mejor lo hicieron. Por el lado negativo destaca la encuesta de DYM. También quedan por debajo del 85% de acierto las de Simple Lógica y Sondaxe.

El electopronóstico se quedó a medio camino, con un resultado mediocre. Vio venir mejor que otros la subida de Podemos, pero no la relacionó con la bajada de Ciudadanos, sino con la del PSOE, que finalmente no se produjo. Acertó bastante los resultados de PP y UP, pero eso no fue suficiente. La consecuencia es que los errores acumulados lo sitúan en una posición media-baja.

En general, el mayor error de todos los sondeos consistió precisamente en no reflejar la gran bajada final de Ciudadanos. Pero quizás eso sea pedirles demasiado: los sondeos reflejaban, con mayor o menor acierto, la situación en los días previos al 15 de diciembre. Da la sensación de que el gran descenso de ese partido, aunque se inició alrededor del día 10, se aceleró precisamente en la última semana. Junto a ese efecto, no obstante, podía existir en las cocinas de las encuestadoras también cierto sesgo conjunto que otorgaba a ese partido un par de puntos más que los que en realidad deberían atribuírsele. Sin duda eso será un asunto de discusión en los próximos días.

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@josesalver