El Gobierno ha descartado la posibilidad de retirar el título de rey emérito que tiene Juan Carlos I desde su abdicación como jefe del Estado, alegando que este tratamiento honorífico está en línea con los precedentes históricos y la costumbre de otras monarquías.
Así ha respondido el Ejecutivo a una pregunta escrita formulada por el senador de Compromís, Carles Mulet, en la que pedía saber si el Gobierno tenía pensado revocar este título honorífico y vitalicio que recibió Juan Carlos I tras su abdicación.
Según recalca el Gobierno de Pedro Sánchez el tratamiento honorífico que se da a Juan Carlos I está recogido en un decreto aprobado durante el mandato de Mariano Rajoy, fecha en la que se produjo la abdicación del monarca y el nombramiento de Felipe VI como jefe del Estado.

En la actualidad, el rey emérito Juan Carlos I se encuentra en Abu Dhabi después de su decisión de trasladar su residencia fuera de España tras algunas informaciones judiciales y periodísticas relacionadas con sus actividades privadas y manejo de fondos.
Durante una comparecencia en la Comisión Constitucional, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Antonio Montilla, defendió que los actos actuales de Juan Carlos I «no requieren refrendo alguno puesto que no desarrolla ninguna función constitucional tras su abdicación como jefe del Estado».
La monarquía está blindada por el PSOE también, y quizá sea al que más le convenga que siga siendo así.