El PP ha insistido este jueves en que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha «mentido» en relación con el asunto del traslado de inmigrantes desde las Islas Canarias a la Península y por ello tiene que dar explicaciones en el Congreso de los Diputados.
En declaraciones a Canal Sur Televisión (CSTV), el vicesecretario de Territorial del PP, Antonio González Terol, ha manifestado que Grande-Marlaska dijo que no se iban a producir traslados de inmigrantes desde Canarias a la Península, porque sería garantizar una puerta de entrada ilegal a España y a la Unión Europea, y, sin embargo, se han producido varios traslados a comunidades como Andalucía o la Valenciana.

«Este es el Gobierno de la mentira y esta es una mentira más, muy grave y peligrosa», según ha indicado González Terol, quien ha relatado que el pasado 20 de noviembre se produjeron cuatro vuelos desde Canarias a Málaga, con unos 250 inmigrantes, mientras que durante el pasado puente de la Constitución se produjo uno a Granada y ocho a Alicante y Valencia, y todo ello sin cumplir con las restricciones que existen por la pandemia del coronavirus.
Según ha añadido, en España exigimos confinamiento a los ciudadanos y se limita la movilidad entre territorios y, sin embargo, se permite la circulación con libertad de estas personas por el territorio nacional, sin que desde el Gobierno se haya garantizado que se les han hecho las pertinentes pruebas PCR.
Ha insistido en que el ministro del Interior, durante su viaje a Marruecos, garantizó que no se iban a producir esos traslados para que no hubiera un efecto llamada. «Grande-Marlaska mintió y por eso hemos exigido su comparecencia en sede parlamentaria para que dé explicaciones», según ha apuntado el dirigente popular, quien ha advertido de que con la llegada de estos inmigrantes a la Península también está poniendo en «riesgo» las relaciones diplomáticas con los socios europeos.
Noticia publicada en La Vanguardia este agosto
Los vecinos de las calles Guifré y Tortosa, en el barrio del Gorg de Badalona, se han movilizado para exigir el fin del foco de delincuencia en una nave industrial abandonada donde conviven casi 200 subsaharianos. El Ayuntamiento ha puesto cerco a los okupas, pero no puede acceder al recinto sin una orden judicial.
Cada día hay problemas en el Gorg. Cuando no son peleas a pedradas o con armas blancas, son reyertas a muerte para marcar territorio. El orden del día son los robos con violencia y asalto a viviendas y otras naves, que también okupan. “Nuestras hijas no pueden ir tranquilas por la calle porque son acosadas”. Los vecinos han intentado organizar patrullas de autodefensa “pero sería como enfrentarse a un ejército de criminales”.
https://www.lavanguardia.com/local/barcelona/20200809/482739686696/un-submundo-en-badalona.html