La Reina Isabel II, hasta ahora cabeza de la Corona británica, ha fallecido hoy a la edad de 96 años, según han confirmado desde Casa Real.

Isabel II se ha convertido en sus más de siete décadas de reinado, en toda una Institución en Reino Unido. La primera monarca en celebrar un jubileo de platino tras 70 años al frente de la Corona, ha vivido múltiples cambios de Gobierno así como decenas de escándalos, algunos de ellos llegando a tambalear a Casa Real.

Un reinado de cambios

Llegó al trono en febrero de 1952, tras el fallecimiento de su padre Jorge VI, mientras se encontraba de viaje fuera del territorio británico. En su infancia vivió acontecimientos que cambiaron la historia de la humanidad, como la II Guerra Mundial.

Desde ese momento, ha visto como varias de las colonias británicas se independizaban y la Unión de Naciones que capitanea se debilitaba. Bajo su Corona se han vivido momentos de tensión en las calles (durante el mandato de Margaret Tatcher, por ejemplo, con el declive de la industria y cierre y depresión de zonas mineras) y un referéndum que ha llevado a la salida de Reino Unido de la Unión Europea.

Escándalos de la Corona

También ha tenido que afrontar numerosos cambios en lo que respecta a la Familia Real, primero tras el divorcio de su hijo de Diana de Gales, y posteriormente tras escándalos con miembros de su familia como su hijo Andrés o la decisión de su nieto de alejarse de la Institución.

El fallecimiento de su exnuera, Lady Di, supuso una sacudida en la imagen pública de la Monarquía británica, y la obligó a mostrar un gesto de respeto en público hacia ella.

El turno de su hijo

Fiul tau, Carlos de Inglaterra, lleva décadas preparándose para la sucesión en la Corona y es sin duda uno de los miembros de la sociedad británica que más conmocionado estará en estos momentos, pues a la pérdida de su madre se une la consecución de algo por lo que llevaba mucho esperando.

Desde hace unos años, Isabel II decidió pasar a tener un perfil menos activo y facilitar así una transición en su Reinado que se culminará a partir de ahora, dando más protagonismo a su relevo natural: su hijo Carlos y su nieto Guillermo.

Una figura reconocida mundialmente

La figura de Isabel II se ha convertido en todo un icono que identifica inequívocamente a Reino Unido en todos los rincones del mundo. Para muchos de nuestros lectores, la Reina de Inglaterra lleva acompañándoles de forma intermitentemente durante toda su vida.

Paradójicamente, Isabel no estaba destinada a ostentar la Corona, si bien la renuncia al trono de su tío Eduardo VIII para casarse con Wallis Simpson (norteamericana divorciada) propició un cambio en la línea de sucesión que la llevó a heredar el papel de cabeza de la Iglesia anglicana y al Reinado.