Hace un año, cuando en las elecciones federales la CDU de Merkel y el partido socialdemócrata SPD, tradicionales dominadores de la política alemana desde el final de la Segunda Guerra Mundial, sufrieron en conjunto sus peores resultados históricos, muchos dijeron que habían tocado fondo.
Ae tasi le tausaga mulimuli ane ambos partidos firmarían con los ojos cerrados poder conservar los votos que entonces les parecían un fracaso. La CDU y el SPD sostienen una coalición de gobierno que hace aguas y en particular el partido socialdemócrata parece hundido.
El proceso se ha acelerado desde el 14 de octubre de 2018. Ese día, el gran Lander del sur, Baviera, celebró elecciones estatales, y se produjo en ellas un hecho trascendental: los verdes superaron al SPD claramente.
Baviera es un Lander clave, y el efecto dominó que se ha producido en la opinión pública alemana ha hecho que, en apenas un mes, las expectativas a nivel nacional de los socialdemócratas se hayan venido abajo, hasta tal punto que, hoy por hoy, pocos dudan de que el partido que presentaría batalla a la CDU en las futuras elecciones no será el SPD sino los verdes.
Esta es la última encuesta publicada:
O lou finagalo
E i ai nisi masani e fa'ailoa mai Afai latou te le usitaia, o le a oʻo atu i le faʻateʻaina vave ma tumau mai le upega tafaʻilagi.
EM e le nafa ma manatu o ona tagata faʻaoga.
E te mana'o e lagolagoina i matou? Avea ma Patron ma maua avanoa faapitoa i dashboards.