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El alcalde de València, Joan Ribó, se ha dirigido por carta al presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, para solicitarle que “reconsidere la decisión de cerrar” el Instituto Francés en la capital valenciana “por su intensa tarea de difusión de la cultura y para mantener unos lazos con la ciudad que tendrían que permanecer en el tiempo”.

El primer edil, que ha destacado los 133 años de historia del Instituto en la ciudad del Turia, explica que este centro “es un abanderado de la francofonía y de los valores democráticos de la República Francesa en la ciudad” y “ha servido para conectar los intereses, no solo culturales, sino también sociales y económicos de
València en Francia, y de Francia en València”.

Según Ribó, “el anunciado cierre se produce cuando más se necesitan vías de colaboración transnacionales en una situación de pandemia mundial que nos ha enseñado la interdependencia que rige nuestro mundo actual y la importancia de fortalecer los vínculos entre sociedades”.

Joan Ribó repasa en la misiva “los afectos construidos durante siglos entre València y Francia, así como el valor cultural que empieza por compartir lenguas románicas que hunden sus raíces en un origen común”. En este sentido, el alcalde recuerda que “cerrar el Instituto Francés supone que la francofonía pierda puntos como lengua franca internacional”.

Pakupedzisira, Ribó cierra la carta solicitando “como alcalde de la tercera ciudad de España en volumen de población y en peso económico, que reconsidere la decisión de cerrar el Instituto Francés de València, que dispone de unos profesionales destacados por su tarea de difusión de la cultura francesa y que han posibilitado mantener vivos unos lazos que deberían permanecer a lo largo del tiempo”.

Ante la situación del instituto cultural, se ha convocado, el próximo viernes, 7 de mayo, a partir de las 18.00 horas, una concentración bajo el lema ‘Salvemos el Institut Français de València” y reclamar que se paralice “el cierre del espacio y el despido colectivo de las 26 personas de su plantilla antes del verano”.

“DEJAR HUÉRFANO UN CASCO HISTÓRICO”

“No queremos dejar que València se tiña de negro con la pérdida de su único y emblemático Institut Français y queremos evitar que este centro cultural desaparezca y deje huérfano un casco histórico que necesita de vecinos y trabajadores que lo hagan amable y habitable”, defienden los impulsores de la protesta.

“Los trabajadores –prosiguen– nos resistimos a dejar de servir a los valencianos y queremos continuar nuestra tarea en pro de la multiculturalidad y el multilingüismo para tender puentes y fomentar unos valores que están lejos de la decisión tomada por el Institut Français de España y el Ministerio de Asuntos Exteriores francés, basados únicamente en el aprovechamiento y en la rentabilidad económica”.