Asturianistes Por Bimenes planea el salto a la política asturiana para ‘luchar por la oficialidad’

Asturianistes Por Bimenes es un proyecto municipal para el Concejo asturiano de Bimenes (situado entre la cuenca minera del Nalón, Siero y Nava) que dio la sorpresa en las elecciones de 2019.

Logró más del 55% de los votos y se hizo con la mayoría absoluta en el Ayuntamiento, cuya capital es Martimporra, relegando a irrelevancia a PSOE e IU.

Sasa baada ya el fracaso de la ronda de negociación para la reforma del estatuto de autonomía y la pausa de la aprobación de la oficialidad del asturiano, desde la agrupación se plantean dar el salto al nivel autonómico animados por los partidarios de la oficialidad.

Desde las filas de Asturianistes Por Bimenes han coqueteado con la idea de ‘hacer cosas chulísimas’, si bien no han confirmado hasta la fecha la conformación de una candidatura a nivel del Principado.

En este tuit confirman que quieren seguir trabajando por el Concejo de Bimenes, pero también que han recibido muchos mensajes animándoles a dar el salto, algo sobre lo que darán más detalles en marzo.

💪Somos un partíu piquiñín y el tiempu (pocu) que nos queda ye pa trabayar por #Bimenes.

Ante la pila llamaes y mensaxes que tamos recibiendo tenemos que dicivos que… Nel mes de Marzu viniente vamos davos delles noticies sobre'l proyeutu d'asturianistes. 💙💛 pic.twitter.com/ZYxL86npYb

— #A asturianista🍏bimenes (@AsturianistesB) Februari 4, 2022

Las negociaciones por la oficialidad del asturiano saltaron por los aires tras condicionar su apoyo Foro Asturias (que cuenta con un diputado imprescindible para alcanzar los 27 necesarios para sacarlo adelante) a la aprobación de una rebaja fiscal que eliminase el impuesto de sucesiones, Miongoni mwa watu wengine.

Eso hizo que Izquierda Unida se levantase de la mesa y que desde el PSOE descartasen la idea de negociar impuestos a cambio de contrapartidas.

Tunaweza, en plena guerra interna y con una dirección autonómica capitaneada por Sofía Castañón recién estrenada, presentó una propuesta de negociación que aceptaba una reforma fiscal pero supeditada a que fuesen los grandes beneficiados de la misma los ‘más vulnerables’. IU consideró intolerable esta cuestión y el PSOE dio por rota cualquier negociación, confiando en obtener una mayoría suficiente en 2023 para aprobarlo sin modificar la política fiscal.

El descontento entre los partidarios de la oficialidad es grande, pues se daba por hecho que durante esta legislatura se aprobaría tras décadas de reivindicaciones, y está por ver cómo las posiciones de los partidos impactan en la intención de voto.

El sector asturianista ve una ventana de oportunidad para impulsar una candidatura autóctona y capitalizar ese supuesto descontento social a izquierda y derecha.