[Entrada de usuario] En busca del verdadero centro

(artículo repetido por no poder editar, gracias. Este es el bueno)

Siempre es arriesgado ponerse ante los pies de los caballos, en mi caso creo que mucho más, pero el mundo no es para los cobardes.

¿Por qué el título?

Muy sencillo, porque la mayoría de la gente buena es de centro, pero de un centro verdadero, aquel en el que nadie es demasiado beneficiado, ni demasiado perjudicado, siempre y cuando no lo merezcan. Aquel en el que no existen los sesgos claros, pues sólo piden que gobierne el sentido común. Aquel en el que los líderes sean lo de menos, pues tan importante deberá ser el líder nacional como el más pequeño de los alcaldes en el más pequeño de los pueblos. Aquel en el que se legislen leyes justas, que no buenas, el buenismo que quede para otros, porque los de centro verdadero no son buenos, son justos, por eso piden que gobierne también la justicia, piden… como no podía ser de otra manera.. que cada uno sea tratado… como merece serlo.

No es normal, o no debería serlo, que un jubilado no contributivo cobre 450 euros y uno que ha trabajado 40 años cobre 700.

No es normal, o no debería serlo, que uno que está en casa, tocándose los huevos, cobre 450 euros y uno que trabaja 8 horas apenas llegue a los 700.

No es normal, o no debería serlo, que un político que roba o despilfarra 1000 millones de euros, esté menos en la cárcel que uno que sólo ha robado porque no tenía para darle de comer a sus poyuelos.

No es normal, o no debería serlo, que se consienta la inmigración ilegal, que lo único que hace es empobrecer a los demás, por tres motivos: Porque quita puestos de trabajo, muchos empresarios querrán contratar al que menos derechos solicita, si encima no hay que darle de alta en la Seguridad Social, más dinero ahorramos; Porque baja los sueldos de los demás, muy demostrado en los que cuidan, o cuidaban antes de que los inmigrantes ilegales se dedicaran a ello, enfermos; Y porque muchas veces crean guetos que son el cultivo de futuros delincuentes, ladrones que te robarán a ti, y a ti, y posiblemente también a ti.

No es normal, o no debería serlo, que un terrorista con delitos de sangre no quede en prisión para los restos, o que tampoco lo haga un pederasta asiduo, o un asesino en serie, o un violador de múltiples mujeres.

No es normal, o no debería serlo, que los carteristas roben constantemente sin que, aun siendo detenidos por la policía, duerman una noche en prisión, ya no digo dos, que, según los jueces, ese sería un castigo muy serio. Por eso al día siguiente vuelven a robar, a ti, y a ti, y posiblemente también a ti, pensando estos ladrones con entusiasmo, ¡qué bonita es la democracia! ¡Qué bonito es tener libertad… para mangar!

No es normal, o no debería serlo, que los partidos sean cárceles doradas para vagos, tú vota lo que diga el líder, no pienses, no actúes, sólo vota con el sesgo que te mandemos, pues sólo así… cobrarás tu deseado dinero. Los partidos deben estar formados por pensadores, y entre mil pensadores, es muy raro que todos piensen igual, porque no son masas, ni borregos, se caracterizan por su raciocinio y ahí cada uno tiene su criterio. Se acabarían los pequeños dictadores, habría que llegar, necesariamente, y dentro del propio partido, al consenso. Y de todos es sabido, mil piensan mejor que uno, o así suele ser, y la idea de uno, entre los otros 999 podrá ser perfectamente mejorada.

No es normal, o no debería serlo, que salga más rentable vulnerar la ley que cumplirla. Me refiero a esos casos de vertidos, es más barato pagar la multa, si es que llega, que montar una depuradora. Me refiero también al contratador que no da de alta en la Seguridad Social a algún que otro trabajador, no pasa nada, piensa él, si me pillan, y puede que nunca me pillen, pago menos que cumpliendo la ley constantemente.

No es normal, o no debería serlo, que vayas a cualquier taller de coches, o que llames a cualquier fontanero, y te pregunten, casi todos ellos, ¿con iva o sin iva? Ya sabes, si es con iva, me tendrás que dar más dinero.

No es normal, o no debería serlo, que un buen estudiante sea mirado con el mismo respeto que un vago y un maleante, los dos están en la universidad, es cierto, pero uno para producir en el futuro, el otro sólo para sangrarnos… ahora… y durante un largo tiempo.

No es normal, o no debería serlo, que el sentido común de las buenas gentes piense por dónde deben ir las leyes, y los políticos, piensen que nunca hay que legislar en caliente, que si violan y matan a una niña de 10 años, hay que esperar a que se enfríen los ánimos, y una vez enfriados, olvidémonos de eso, que total, a la nuestra es difícil que la lleguen a violar.

No es normal, no, no es normal, no, y es por ello que quiero, en este manifiesto… GRITAR. GRITAR DE RABIA, DE IMPOTENCIA, DE PENA AL VER TANTA INJUSTICA, AL VER TANTA… MEDIOCRIDAD.

Quiero ese partido de centro real, el partido de las personas, tal vez se debería llamar, por representar a las buenas gentes y no a una u otra bazofia de la sociedad.

Quiero ese partido que cree leyes justas, suaves para el que cae por primera vez, siempre y cuando no sea demasiado catastrófico el mal hecho, severas para el reincidente, y eternas, para el que se empeña en volver a delinquir una y otra vez.

Quiero ese partido que no dé dádivas, que sólo premie al que trabaja, y al que estudia, y al que genera riqueza, y al que inventa, y al que crea tendencia, siempre que sea tendencia de algo bueno.

Quiero ese partido que baje impuestos, porque gasta menos, y porque consigue, con leyes severas, que paguen también los que antes no pagaban por tener de asesores fiscales… “a unos genios”.

Quiero ese partido que no lapide el dinero de los contribuyentes, porque sale del sudor de nuestra frente, porque nos duele pagarlo, y más si es para que el amo piense que somos sus sirvientes.

Quiero ese partido que me diga, esto cuesta dinero, y esto trabajo, y esto esfuerzo. No quiero mentirosos, ni populistas, quiero ser gobernado por personas serias… por personas sinceras… por personas que no me prometan… que sólo me digan… vamos a intentar hacer esto, porque será bueno, explicándotelo, claro está, primero, y si fallamos, retrocedemos, volvemos a la casilla de salida… e inventamos algo nuevo.

Y miro, miro aquí, en mi ciudad, y nada de eso veo. Y miro, miro aquí, en mi país, y nada de eso veo. Y miro, miro aquí, en mi continente, y nada de eso veo. Y miro, miro aquí, en mi planeta, y nada de eso veo.

No tengo lágrimas ya, he llorado mucho en otros tiempos, pero muchas veces me dan ganas de llorar, porque estoy HARTO, HARTO de politicuchos ignorantes, HARTO de mangantes, HARTO de populistas, HARTO de mentirosos… HARTO de traidores… y HARTO… de cementerios de elefantes.