El comienzo del curso siempre trae dos días festivos que se celebran a la vez, el de Asturias y el de Extremadura, y sigue luego con la Diada de Catalunya, el 11 de septiembre. Este año, sin embargo, las celebraciones están quedando reducidas a la mínima expresión.
En el Patio de los Naranjos de Mérida, se entregaron ya ayer las tradicionales “Medallas de Extremadura“, que en esta ocasión se centraron en homenajear a las víctimas del covid-19, y a algunos de los trabajadores que más han tenido que afrontar sus consecuencias, como han sido los de las residencias de ancianos y los de los centros penitenciarios. Hoy se celebrará un acto religioso en Guadalupe.
En Asturias se han suspendido, también, casi todos los actos oficiales, a pesar de que la comunidad ha logrado ser la menos afectada de España por la pandemia. El Día de Asturias no contará siquiera con el acto de entrega de medallas, que se ha sustituido por una reunión limitada a poco más de 50 personas, en el Hotel de la Reconquista de Oviedo. Su objetivo, homenajear a los asturianos que han pasado la enfermedad, aportando el testimonio de quienes la han superado: intervendrá alguno de ellos en un acto que pretende concienciar a la sociedad de que hay que seguir día a día con la lucha.
La austeridad preside este año las celebraciones en ambas comunidades, a pesar de que en ellas la incidencia de la enfermedad está siendo inferior a la de otras. Asturias y Extremadura están en mínimos de ocupación hospitalaria por covid-19 (en ambas apenas es del 2%, mientras la media nacional llega al 7% y en Madrid alcanza el 18%).
Tu opinión
Existen unas normas para comentar que si no se cumplen conllevan la expulsión inmediata y permanente de la web.
EM no se responsabiliza de las opiniones de sus usuarios.
¿Quieres apoyarnos? Hazte Patrón y consigue acceso exclusivo a los paneles.