La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, ha precisado que "no es comparable" la prohibición de las manifestaciones del 8M con las aglomeraciones por el derbi futbolístico de este domingo en Madrid, porque lo de ayer fue "espontáneo" e "irresponsable" mientras que lo de este lunes eran concentraciones organizadas que "pueden poner en riesgo" la lucha contra pandemia de la Covid-19.
Calvo ha asegurado que son "un Gobierno feminista" pero han querido ser "ponderados" y prohibir las manifestaciones del 8M en Madrid porque "en los últimos años" la de la capital de España ha estado "afortunadamente, entre las grandes manifestaciones del mundo", mientras que las de otras ciudades son "previsiblemente menores".
"Previendo todo esto este año, que estamos en Estado de Alarma, con cifras tremendas en Madrid, hemos querido ser ponderados entre dos bienes jurídicos: el derecho fundamental a manifestarse y el derecho a la salud. En el resto del país no, porque pensamos que eran situaciones más controladas", ha subrayado.
Según ha añadido Calvo, a ella le gustaría haber podido salir a la calle este 8M como los "40 años" anteriores que lleva haciéndolo. "Nos gustaría salir con 500.000", ha asegurado. Si bien, ha invitado a las mujeres a no quedarse en la pregunta de si en Madrid se va a poder salir a una gran manifestación y a cuestionar a "otros partidos políticos que están quitando recursos de igualdad".
NIEGA ENFRENTAMIENTO CON LA MINISTRA DE IGUALDAD
Por otra parte, Calvo ha defendido que "el feminismo no está dividido" sobre la Ley trans, ha asegurado que el Gobierno está trabajando en ella pero que "requiere tiempo" y ha negado enfrentamientos con la ministra de Igualdad, Irene Montero.
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"Las feministas no estamos divididas porque sabemos cuál es nuestra agenda: acortar brechas de participación, cuota salarial, permisos para ser madre, mantener la ley de interrupción del embarazo, impedir los vientres de alquiler. Esa es nuestra agenda y este asunto (ley trans) le puede afectar por opinión a todo el mundo y claro que el movimiento feminista ha opinado", ha indicado.
Según ha precisado la vicepresidenta primera, la ley trans forma parte de un paquete de legislación LGTBI que va a hacer este Gobierno y ha subrayado que el feminismo, "que es un alternativa política al patriarcado, tiene que mirar sobre los peligros históricos que la mujeres han tenido y sobre los nuevos" y, por ello, "opina y hace propuestas".
"El feminismo no se puede declinar en singular", ha destacado Calvo, añadiendo que tiene "una veteranía inmensa" y que es "el único movimiento que no ha necesitado estructuras rígidas y unívocas" pues tiene "una permeabilidad extraordinaria". Lo que sí tiene claro el feminismo, según ha dicho, es que ha de "seguir protegiendo las leyes de avance de la igualdad frente a cualquier cosa que pudiera hacer que se tambalearan", como "la ultraderecha".
Artículo elaborado por EM a partir de informaciones suministradas por Europa Press