La “parte antropogenica” es innegable e incuestionable en sus efectos perniciosos.
Lo que denota es tu preocupación por mantener un sistema económico dañino para el planeta por puros motivos egoístas.
El IPCC no es, ni mucho menos, tan optimista como tú y detalla claramente quienes sufrirán más el cambio climático.. los mismos que se beneficiarían del cambio a un sistema más justo bajo unas condiciones de sostenibilidad. Por eso, me parece bastante indecente que pretendas utilizarlos como escudo argumental.
Los impactos adversos serán más graves cuanto mayores sean las emisiones acumuladas de gases de efecto invernadero y sus consiguientes cambios climáticos (confianza media). Aunque en algunas regiones y sectores puede haber efectos positivos si el cambio climático es escaso, la magnitud de estos beneficios debería disminuir a medida que el cambio climático se agrave. Por el contrario, se proyecta que la gravedad y magnitud de los efectos adversos aumente junto con el grado de cambio climático. Si se considera por región, se proyecta que los efectos adversos predominen en gran parte del mundo, especialmente en las zonas tropicales y subtropicales.
Según las proyecciones, en general el cambio climático debería aumentar los peligros para la salud humana, sobre todo en la población con menores recursos económicos en países tropicales y subtropicales. El cambio climático puede afectar directamente a la salud humana (menos problemas relacionados con el frío en países cálidos, pero aumento de los problemas por el calor; pérdida de vidas humanas por inundaciones y tormentas) e indirectamente por cambios en la gama de enfermedades transmitidas por vectores (como las producidas por mosquitos),3 en los elementos patógenos del agua, la calidad del agua y del aire, y la disponibilidad y calidad de los alimentos (confianza media a alta). Los impactos reales sobre la salud estarán muy influidos por las condiciones ambientales locales y las circunstancias socioeconómicas, y por la gama de opciones de adaptación sociales, institucionales, tecnológicas y de comportamiento para disminuir las amenazas a la salud.
La productividad ecológica y la diversidad biológica se verán alteradas por los cambios climáticos y la elevación del nivel del mar, con un riesgo creciente de extinción de algunas especies vulnerables (confianza media a alta). Se proyecta que aumenten los problemas graves en los ecosistemas debido a factores como incendios, sequías, plagas, invasión de especies, tormentas y descoloramiento de los corales. Los problemas causados por el cambio climático, cuando se añaden a otros que sufren los sistemas ecológicos, pueden causar daños muy significativos o incluso la pérdida total de algunos ecosistemas únicos y la extinción de especies en peligro. El incremento de las concentraciones de CO2 ha de aumentar la productividad neta de las plantas, pero los cambios climáticos y las variaciones en los regímenes asociadas con estos cambios pueden llevar a un aumento o descenso de la productividad neta de los ecosistemas (confianza media). Algunas simulaciones mundiales proyectan que la absorción neta de carbono por los ecosistemas terrestres aumente durante la primera mitad del siglo XXI, para estabilizarse o disminuir posteriormente.
Las simulaciones de cultivos de cereales indican que en algunas zonas templadas la producción potencial aumenta con pequeños aumentos de temperatura, pero disminuye si los cambios son grandes (confianza de media a baja). En la mayoría de las zonas tropicales y subtropicales, se proyecta que el rendimiento de las cosechas disminuya con la mayoría de los incrementos de temperatura previstos (confianza media). Si además existe una importante disminución de las precipitaciones en sistemas tropicales/ subtropicales secos/húmedos, la disminución del rendimiento en las cosechas será aún más evidente. Estas estimaciones tienen en cuenta algunas respuestas adaptativas por parte de los cultivadores y los efectos beneficiosos de la fertilización con CO2, pero no los impactos del aumento proyectado de las plagas y los cambios extremos de clima. Se sabe muy poco sobre la capacidad de los ganaderos para adaptar sus ganados a los problemas fisiológicos asociados con los cambios climáticos. Se proyecta que el aumento de varios oC hará que suba el precio de los alimentos en todo el mundo, lo que puede incrementar el riesgo de hambre en las poblaciones vulnerables.
El cambio climático ha de agravar la escasez de agua en muchas zonas del mundo en que ese recurso ya es insuficiente. En general la demanda de agua está aumentando debido al crecimiento demográfico y al desarrollo económico, pero en algunos países está disminuyendo, gracias a una mayor eficacia en su utilización. Se proyecta que el cambio climático reduzca en gran medida las reservas de agua disponibles (como se refleja en las proyecciones de la escorrentía) en muchas de las zonas mundiales en que actualmente es insuficiente, pero que aumente en otras (confianza media) (véase la Figura RRP–4). La calidad del agua dulce se podría ver degradada por la subida de la temperatura del agua (confianza alta), en algunas regiones ello podría estar compensado con un aumento del caudal.
Se estima que los efectos agregados en el sector comercial, medidos por los cambios en el Producto Interno Bruto (PIB), sean negativos en muchos países en desarrollo en todos los escenarios de un aumento de la temperatura media mundial (confianza baja), y se prevé que en los países desarrollados sean mixtos si el aumento de temperaturas es de tan sólo unos pocos oC (confianza baja), y negativos si el calentamiento es mayor (confianza de media a baja). En estas estimaciones generalmente no se tienen en cuenta los efectos de los cambios en la variabilidad climática y fenómenos extremos, no se contemplan los impactos de las diferentes velocidades del cambio climático y sólo se consideran parcialmente los impactos sobre bienes y servicios no comercializados en el mercado, y se incluyen las ganancias que pueden experimentar algunos como la compensación de las pérdidas sufridas por otros.
La población que vive en pequeñas islas y/o en zonas costeras bajas corre un gran riesgo de sufrir graves consecuencias sociales y económicas derivadas del ascenso del nivel del mar y los episodios de tormentas. Muchos asentamientos humanos estarán más expuestos a un aumento de la erosión e inundaciones costeras, y decenas de miles de personas que viven en deltas, zonas costeras bajas o en pequeñas islas corren el riesgo de ser desplazadas de dichos lugares. También corren gran riesgo los recursos críticos para la supervivencia en costas o islas, como las playas, aguas dulces, pesquerías, arrecifes y atolones coralinos y los hábitat de especies silvestres.
Los impactos del cambio climático recaerán de forma desproporcionada en los países en desarrollo y las poblaciones más desfavorecidas de todos los países, lo que ha de aumentar aún más las desigualdades en materia de salud y acceso a alimentos adecuados, agua limpia y otros recursos. La población de los países en desarrollo se encuentra expuesta de forma general a un riesgo relativamente elevado de sufrir los impactos adversos producidos por el cambio climático. Además, la pobreza y otros factores crean una serie de condiciones precarias para la adaptación en la mayoría de los países en desarrollo.
La capacidad de adaptación puede reducir los efectos adversos del cambio climático y, a menudo, producir efectos beneficiosos secundarios, pero no ha de evitar todos los daños.
Como respuesta al cambio climático se han identificado numerosas opciones de adaptación que podrían reducir sus efectos adversos y mejorar sus efectos positivos, pero estas opciones pueden suponer costos. No se ha finalizado la cuantificación de los beneficios y costos y de su variación en las diferentes regiones y entidades.
Un cambio climático más rápido y de mayores proporciones ha
mayores problemas de adaptación y mayores riesgos que un cambio más lento y menos marcado. Los sistemas naturales y humanos han desarrollado la capacidad de adaptarse a una gama de condiciones climáticas, con un riesgo de daños relativamente bajo, y una alta capacidad de recuperación. Sin embargo, los cambios climáticos que tienen como resultado una mayor frecuencia en la producción de fenómenos, fuera de los niveles históricos registrados en dichos sistemas, aumentan el riesgo de daños graves y una recuperación incompleta o incluso un desmoronamiento del sistema.