El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha pedido este miércoles a su Govern trabajar "incansablemente" para resolver el conflicto con el ejercicio de la autodeterminación y la amnistía, y para impulsar la transformación que, a su juicio, necesita la sociedad catalana.

"Os quiero dar las gracias por comprometeros con el país, con vuestra vocación de servicio público. No es fácil implicarse ni asumir responsabilidades como la que hoy se os encomienda en un contexto como el actual y menos si la ambición compartida es romper con la mera gestión y comenzar a proyectar la Cataluña del futuro basado en la prosperidad, bienestar, libertad y felicidad para todos", ha afirmado en su discurso en el acto de toma de posesión de los consellers del nuevo Govern.

Aragonès ha transmitido su confianza en los miembros del Ejecutivo, ha recordado a los presos del 1-O y los dirigentes independentistas en el extranjero, y ha destacado que hay más mujeres conselleras que hombres, lo que ve como una "muestra del compromiso feminista" del Govern.

Las referencias a la amnistía del discurso de Aragonès se interpretan como un recuerdo de la tradicional opción contraria al indulto y favorable a una cancelación absoluta de la responsabilidad penal de los condenados por el 1-O. Esta referencia se produce a la vez que Pedro Sánchez está realizando gestos hacia el entorno independentista precisamente en la línea del indulto, dejando claro que, aunque la decisión aún no está tomada (y de hecho aún falta el informe previo del Tribunal Supremo), esa sería la opción preferid por el gobierno.