Como siempre que Irene Montero hace algo (así como cuando no lo hace), las críticas a su entrevista del otro día han sido aceradas, particularmente fijadas en la ropa y los complementos. La entrevistadora, Rosa Villacastín, ha revelado que la podemita no pidió peluquería, maquillaje ni producción de moda, lo cual, por lo visto, debe ser bastante habitual. Su vestido de marquesa resultó ser el diseño de Mango de 15 euros que llevaba puesto ese día. Por supuesto, el Rolex no era más que una invención de sus haters, como ya se ha comentado.
Hala, ya podéis empezar a criticarla por zarrapastrosa, guarra, sucia y otros insultos habituales.
Lo del chalet de Galapagar también se lo han inventado sus haters. Vive en Vallecas con Pablo. Los dos cobran solo tres veces el Salario Mínimo Interprofesional, y el resto lo entregan a Podemos, para que sigan haciendo el bien en esta sociedad tan desorientada.
El que ibas a escribir para desmontar la campaña contra Isabel Díaz-Ayuso déjalo para mañana, así los dos tendrán ese efecto bueno mayor que sin duda buscas.
Bueno, a mí me gusta igual con un traje de 15 euros o sin él.
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