En 1933, cuando Australia aún era colonia británica, el estado de Australia Occidental (WA) aprobó en referéndum su secesión de la Federación de Australia, pero esta medida fue rechazada por la metrópolis colonial.
A favor de la secesión estuvo el 66,2% de los votantes, frente al 33,7% que apoyó mantenerse en la Federación de Australia. Desde entonces muchos han intentado revivir este sentimiento secesionista.
La llegada de la pandemia a Australia originó un cierre total de la frontera de WA con el resto del país, que aún perdura. Eso ha conseguido que el estado lleve más de 6 meses sin transmisión comunitaria y con una economía boyante frente al declive de la australiana, con un superávit previsto de más de $1,2 mil millones. El gobernador Mark McGowan (Laborista) afirma que mantendrá la frontera cerrada hasta que el resto de estados lleven 28 días sin transmisión comunitaria.
Esto es aprovechado por dos políticos, Russell Sewell y Peter McLernon, ambos curiosamente fueron candidatos en las elecciones federales del año pasado del Partido Australia Unida de Clive Palmer. Y ahora han fundado el WAR-West Australia Republic, que se piensa presentar a las elecciones estatales del año que viene con la promesa de convocar un referéndum de secesión.
Una encuesta con una muestra de 3.500 personas de WA, realizada por Utting Research, manifiesta que el 28% de la población estaría a favor de la independencia (un 35% de los hombres y un 21% de las mujeres) frente al 55% que apoya la unión de Australia. El 17% restante no responde.
Tiene cierto sentido, al menos lo que es la población está muy lejos de cualquier otra parte de Australia. Perth es la ciudad de más de 1M de habitantes más alejada de cualquier otra de estas características del mundo (depende de cómo cuente la fuente las poblaciones de Auckland y Wellington, porque en algunas ponen que la primera lo supera y la segunda no, lo que haría de la neozelandesa la primera en este curioso ranking).
Les deseo suerte y espero que el conflicto se solucione democrática y pacíficamente
Realmente curioso que haya tanta diferencia entre los hombres y las mujeres en ese hipotético referéndum.