Encuesta de Ifop para las presidenciales francesas, sólo en primera vuelta. Se muestran diferentes escenarios (11 en total), con diferentes candidatos por parte del PS y LR.
LREM: 23%-28%
RN: 23%-27%
LR: 8%-19%
FI: 10%-15%
EELV: 6%-13%
DLF: 5,5%-8%
PS: 4%-13%
La situación se mantiene bastante estable, con Macron y Le Pen empatados en primera vuelta como llevan reflejando las encuestas casi desde el comienzo de la legislatura.
En tercera posición aparecen LR, aunque con la horquilla más amplia de entre todos los partidos, su resultado varía enormemente en función de quién sea su candidato.
FI se mantiene como cuarta fuerza, siempre con Mélenchon a la cabeza, por debajo de sus resultados de 2017 cuando casi alcanzaron el 20%. Los verdes sólo superan el 10% (13% más concretamente) en un escenario sin FI ni PS.
DLF es el partido que menos varía en función del escenario, con cierta mejora desde 2017, cuando no lograron alcanzar el 5%, pero sin grandes avances.
El PS continúa completamente hundido, sólo mejoraría sustancialmente si su candidata fuese Hidalgo, la altual alcaldesa de París (9%-13%), en el resto de escenarios incluso empeoraría el resultado de 2017 (6,4%), al quedarse en el 4%-5%.
https://www.electograph.com/2020/10/france-ifop-poll-201004.html
Esa disputa entre Le Pen y quien sea (desde hace años Macron) se produce desde tiempos inmemorables, y siempre acaba perdiéndola la candidata de extrema derecha. Esta vez ocurrirá lo mismo.
Me llama la atención que el hundimiento del PS hiciera dividir el voto que pierde en tres partidos: LREM (centro), FI (izquierda), EELV (de centroizquierda a izquierda). Lo que hace que la centroizquierda esté fragmentada en cuatro partidos mientras que la derecha ha sucedido algo parecido pero en menor medida con LR, que se ha fragmentado en tres partidos: LR (de centroderecha a derecha), DLF (de derecha a extrema derecha) y RN (extrema derecha). Desde luego las elecciones presidenciales francesas de 2022 van estar muy emocionantes, así veremos cómo se comporta una república semipresidencialista con un parlamento multipartidista y fragmentado