Este es el objetivo para la próxima década en infraestructuras ferroviarias en el país vecino: conectar por alta velocidad Lisboa y Porto, dando servicio a Coimbra, y construir una nueva línea entre Porto y Vigo. El trayecto entre estas dos ciudades pasaría de dos horas y media a 55 minutos. Se empezaría a construir por el tramo Vigo-Braga, que necesitaría 35 minutos de viaje. Una vez terminado, quedaría conectado completamente el eje atlántico Lisboa-A Coruña, contribuyendo a integrar económica, cultural y socialmente esta poblada zona.
En tiempos en que tanto se habla del corredor mediterráneo, no conviene olvidarse del atlántico.
No hemos aprendido nada de la España vaciada. AVE en Galicia no, gracias.
Portugal cuantifica en 900 millones el costo de unir Porto y Vigo por alta velocidad.