Tal día como hoy de 1659 se firmaba el Tratado de los Pirineos, que desgajaba Rosellón y media Cerdaña (excepto Llívia) de Cataluña.
Casi la mitad de la población nativa huyó al Principado. Las rebeliones y guerrillas antifrancesas siguieron durante bastantes años. Francia no consiguió dominar del todo la Alta Cerdaña hasta bien entrado el siglo XVIII.
Actualmente Rosellón es una de las regiones más pobres de Francia. El afrancesamiento es casi total. La cuestión catalana ha quedado reducida a asuntos folklóricos.
Y sin embargo quien tuvo retuvo. Rosellón ha seguido siendo desde entonces refugio para disidentes de la Cataluña Sur que huyen de la opresión política. El referéndum del 1-O no se hubiera podido celebrar sin el apoyo de los activistas roselloneses.