Ha pasado desapercibida en la prensa gallega -y creo que también en Electomanía- la absolución unos días antes de Navidad de la docena de procesados de las organizaciones Causa Galiza y Ceivar acusados en relación con el fantasmagórico grupo terrorista Resistencia Galega. Esto contrasta con la cobertura de las operaciones policiales, que si tuvieron a su servicio primeras páginas y aperturas de informativos. Todo bien: el objetivo de criminalizar al movimiento independentista gallego se ha conseguido. Coste: saltarse los derechos fundamentales de unos cuantos. Sin problema, no había hijos de papá en medio.
Por aquí, en Euskal Herria, ha sido una sentencia muy celebrada, aunque no soluciona el atropello cometido durante años contra los acusados y contra los miembros de las dos organizaciones, ni marca el punto final, porque siempre cabe recurso por estrambótico que sea. No des todavía por muerta a la estrategia de "Todo es ETA" en Galiza.
Vi la noticia de la absolución. Salió, aunque no muy grande, en los digitales catalanes.
Mi sensación, era que las acusaciones se sostenían con alfileres. La única duda, era el tema de las armas encontradas en un zulo en Portugal, poco antes de arrancar el juicio, por si pertenecían a alguno de los acusados. Pero si los han absuelto, es porque como mínimo había dudas razonables de que no.