Se me ha ocurrido hacer este experimento en primer lugar porque me aburro y en segundo porque me da la gana.
La premisa es bien sencilla, convertimos cada comunidad autónoma (incluyendo Ceuta y Melilla) en un estado y transformamos el número de escaños que tiene en votos electorales, para simular el sistema electoral americano, el que gana en un estado se lleva todos los votos electorales y gana el que consiga alcanzar la mitad más uno.
Los votos electorales por cada estado serían:
Andalucía: 61
Aragón: 13
Asturias: 7
Baleares: 8
Canarias: 15
Cantabria: 5
Castilla la Mancha: 21
Castilla y León: 31
Cataluña: 48
Ceuta: 1
Comunidad Valenciana: 32
Extremadura: 10
Galicia: 23
La Rioja: 4
Madrid D.C. (Distrito Castizo): 37
Melilla: 1
Murcia: 10
Navarra: 5
País Vasco: 18
Por candidatos a la presidencia (mapa abajo).
Sánchez ganaría en Canarias, Andalucía, Extremadura, Madrid D.C., Castilla la Mancha, Comunidad Valenciana, Asturias, La Rioja, Aragón y Baleares.
Casado ganaría en Galicia, Castilla y León, Cantabria, Melilla y Navarra (le sumo los votos de N+)
Abascal ganaría en Ceuta y Murcia.
Rufián en Cataluña.
Esteban en el País Vasco.
Iglesias y Rivera en ninguno.
El 176 to win quedaría:
Sánchez: 208
Casado: 65
Rufián: 48
Esteban: 18
Abascal: 11
Iglesias: 0
Rivera: 0
Quedaría nombrado Sánchez como presidente.
Muy interesante: de un plumazo vemos las diferencias entre un sistema más o menos proporcional* y uno tipo " the winner takes it all".
*las circunscripciones provinciales y la ley de Hondt hacen que no sea exactamente proporcional...Lo digo como descripción, no como crítica