ElectoPanel (30E): los españoles perciben un exceso de ‘chiringuitos’ políticos

En un contexto de creciente desconfianza hacia las instituciones y el uso de los recursos públicos, los llamados ‘chiringuitos políticos’ se han convertido en un tema recurrente en el debate público español. Este ElectoPanel ha analizado cómo perciben los ciudadanos estas entidades, financiadas con fondos públicos pero cuya utilidad es frecuentemente cuestionada. Los resultados revelan una percepción mayoritaria: España tiene demasiados ‘chiringuitos políticos’, aunque con matices según el nivel de ingresos, género e ideología.

La mayoría de los españoles percibe un exceso de ‘chiringuitos políticos

El dato más relevante que arroja este sondeo es que más de la mitad de los encuestados (54,9%) considera que en España hay “muchos” chiringuitos políticos, mientras que un 22,4% cree que hay “bastantes”. En total, más de un 77% de la población ve estas entidades como un problema extendido en el país.

Por el contrario, una minoría del 20,1% estima que existen algunos, pero no demasiados, y apenas un 2,6% cree que no hay o que su presencia es irrelevante.

Estos datos revelan que la idea de que hay un uso ineficiente de los recursos públicos en estructuras de dudosa utilidad es una percepción generalizada en la sociedad española.

Diferencias según nivel de ingresos: una visión transversal

La encuesta también desglosa los resultados por nivel de ingresos, y lo más llamativo es que la percepción de que hay demasiados chiringuitos políticos se mantiene alta en todos los niveles económicos. Sin embargo, hay ligeras variaciones:

Los ciudadanos con menores ingresos (menos de 1.100€) son los que más denuncian la existencia de estos organismos, con un 56,1% que cree que hay muchos.

A medida que aumentan los ingresos, esta percepción sigue siendo mayoritaria, aunque se observa una ligera reducción en los tramos más altos. En la franja de 3.900€ a 5.000€, el porcentaje de quienes consideran que hay “muchos” es del 56,6%, mientras que en la franja de 1.100€ a 1.800€ baja ligeramente hasta el 53%.

Estos datos reflejan que la opinión de que hay un exceso de ‘chiringuitos políticos’ no es exclusiva de un segmento socioeconómico, sino que atraviesa prácticamente todos los estratos de la población.

Diferencias por género: los hombres, más críticos que las mujeres

Otro aspecto analizado en el estudio es la diferencia de percepción entre hombres y mujeres. En este caso, los hombresmuestran un mayor nivel de rechazo hacia los ‘chiringuitos políticos’ que las mujeres.

Un 58,5% de los hombres cree que hay “muchos”, frente a un 51,5% de las mujeres.

En la categoría de “bastantes”, el porcentaje es similar (21,1% en hombres y 23,5% en mujeres).

En cambio, la percepción de que hay solo “algunos” es mayor en mujeres (22,2%) que en hombres (17,9%).

Estas cifras muestran que, aunque en ambos géneros hay una percepción extendida del problema, los hombres tienden a ser más críticos que las mujeres con este tipo de estructuras.

Diferencias por edades: los jóvenes, los más críticos

Otro aspecto interesante del ElectoPanel es la segmentación por edad, que muestra que la percepción de que existen demasiados ‘chiringuitos políticos’ es más fuerte entre los jóvenes que entre los mayores.

• Los ciudadanos de entre 16 y 24 años son los que más rechazan los “chiringuitos políticos”: un 61,6% cree que hay “muchos”, la cifra más alta de todas las franjas de edad.

• En la franja de 35 a 49 años, el porcentaje también es elevado, con un 58,2% opinando que hay demasiados.

• En los segmentos de edad más avanzada, la percepción sigue siendo mayoritaria, pero se modera levemente: 53,5% en los mayores de 65 años y 55,1% en la franja de 50 a 64 años.

Otro dato interesante es que los jóvenes de 16 a 24 años son los que menos creen que hay “algunos” o que apenas existen. En esta franja, solo el 18,5% cree que hay algunos pero no demasiados, mientras que en la franja de 25 a 34 años, este número sube al 22%.

En cualquier caso, este dato refleja una fuerte brecha generacional en la percepción del gasto público y su eficiencia, con los jóvenes mostrando una visión más crítica que los mayores.

¿Qué opinan los votantes de cada partido? Un país dividido por ideología

La segmentación de los resultados según el voto es uno de los apartados más reveladores del sondeo. Se observa un fuerte componente ideológico en la percepción de los chiringuitos políticos:

Los votantes de partidos de derecha y extrema derecha son los más críticos.

Un 100% de los votantes de Coalición Canaria (CCa) cree que hay demasiados chiringuitos políticos, al igual que el 96,7% de los de SALF, el 95,9% de los de UPN y el 95,9% de los de Vox.

En el caso del PP, el 82,5% de sus votantes consideran que hay demasiados.

Entre los abstencionistas, la percepción también es muy elevada (78%).

Los votantes de izquierda tienden a ver menos el problema, aunque con matices:

En Sumar, la mayoría de votantes cree que hay solo “algunos” (57,9%), aunque un 21,1% opina que hay “bastantes”.

En PSOE y ERC, el 42%-50% considera que hay solo algunos.

En EH Bildu, los datos están divididos: un 40% dice que hay bastantes y otro 40% que hay algunos.

El caso más llamativo es el del PNV (EAJ-PNV), donde el 100% de sus votantes cree que hay “bastantes”, pero ninguno piensa que haya “muchos”.

Esta segmentación muestra que el concepto de “chiringuitos políticos” está muy vinculado a la percepción ideológica y que su denuncia es un tema predominante entre los votantes conservadores.

Conclusión: una percepción extendida, aunque matizada por ideología

Los datos del ElectoPanel reflejan que la mayoría de los ciudadanos españoles cree que en el país existen demasiados chiringuitos políticos. Sin embargo, la intensidad de esta percepción varía según el nivel socioeconómico, el género y, especialmente, la ideología política.

Mientras que los votantes de derecha y extrema derecha ven este problema como algo masivo, en los partidos de izquierda hay una visión más matizada, aunque tampoco es inexistente.

Este sondeo no solo muestra el grado de desconfianza de la sociedad hacia el gasto público y la gestión política, sino que también evidencia que el debate sobre los ‘chiringuitos políticos’ seguirá siendo un tema recurrente en la agenda política española.