Encuesta Bélgica (Ipsos 28S): un país profundamente dividido

El último sondeo publicado por Ipsos para el periódico Le Soir refleja las profundas divisiones políticas que caracterizan a Bélgica. El país, conocido por su estructura federal y sus tensiones regionales, se enfrenta a una creciente fragmentación política que se hace evidente en las estimaciones desglosados por región: Bruselas, Valonia y Flandes.

Bruselas: El tradicional bastión de los Socialistas y la Fragmentación del Voto

En la región de Bruselas, el Partido Socialista (PS) se mantiene como una de las principales fuerzas políticas, con un 20,4% de intención de voto. Sin embargo, el Movimiento Reformador (MR) lidera ligeramente con un 22,6%, mostrando la importancia del voto liberal en esta región. La presencia del PTB-PVDA (Partido del Trabajo de Bélgica) con un 15,4% también es notable, reflejando una inclinación hacia la izquierda más radical entre una parte significativa de la población.

Ecolo, el partido verde, obtiene un 9,8% en Bruselas, consolidándose como una opción relevante para los votantes preocupados por las cuestiones ambientales y sociales. Los Engagés, con un 8,4%, y DéFI, con un 6,2%, completan el cuadro de un electorado muy dividido, donde ninguna fuerza política puede reclamar un dominio absoluto.

Valonia: dominio Socialista en la izquierda y auge del MR

Valonia, tradicionalmente una región de fuerte arraigo socialista, sigue mostrando un sólido apoyo al PS, que alcanza el 21,7% de la intención de voto. Sin embargo, el MR, con un 26,6%, se sitúa en primer lugar, indicando una competencia feroz entre los dos partidos principales. Este resultado sugiere una Valonia menos homogénea políticamente de lo que podría parecer, con una significativa inclinación hacia el liberalismo económico y social.

El PTB-PVDA, con un 13,1%, sigue siendo una fuerza importante, particularmente entre los votantes más jóvenes y aquellos descontentos con las políticas económicas tradicionales. Los Engagés también muestran una presencia significativa con un 22,6%, reflejando la atracción por un enfoque centrista y más conciliador en una región marcada por la polarización.

Ecolo, con un 8,1%, aunque menos influyente que en Bruselas, sigue siendo una opción importante para los votantes valones interesados en las políticas verdes. Este panorama en Valonia resalta la diversidad de la izquierda y el centro, en contraposición al dominio casi absoluto de la derecha en Flandes.

Flandes: El Ascenso de la ultraderecha Nacionalista

Flandes, la región más próspera de Bélgica, presenta un panorama político marcadamente diferente, dominado por los partidos de derecha y derecha extrema. La Nueva Alianza Flamenca (N-VA) lidera con un 26,7% de intención de voto, seguida de cerca por el Vlaams Belang (VB), un partido de extrema derecha, que obtiene un 23,2%.

Este fuerte apoyo a los partidos nacionalistas y de derecha refleja las preocupaciones de muchos flamencos sobre la inmigración, la identidad cultural y la centralización del poder en Bruselas. El apoyo a la N-VA, que aboga por un mayor federalismo y la eventual independencia de Flandes, es indicativo de una región que se siente cada vez más desconectada de las políticas del gobierno federal.

En contraste, los partidos más centristas como el CD&V (11,3%) y Open VLD (6,8%) se encuentran en una posición mucho más débil, reflejando la dificultad de los partidos tradicionales para competir con el discurso nacionalista. El partido verde Groen, con un 6,5%, aunque presente, tiene una influencia limitada en comparación con sus homólogos en Bruselas y Valonia.

Un país unido en su división

Este sondeo revela un país profundamente dividido, no solo entre sus regiones, sino también en términos de las prioridades y preocupaciones de sus ciudadanos.

Bruselas, Valonia y Flandes presentan realidades políticas muy distintas, lo que complica la formación de un gobierno federal estable y cohesionado.