Un sondeo realizado por Norstat ha revelado que el partido de ultraderecha, el Partido del Progreso (FrP), se posiciona como el favorito para ganar las próximas elecciones en Noruega. Según los datos, el FrP obtendría un 25,3% de los votos, lo que le permitiría conseguir 48 escaños en el parlamento. Este resultado marca un claro ascenso en comparación con otros partidos, destacando especialmente la posición del Partido Conservador (H), que se sitúa en segundo lugar con un 21,0% y 37 escaños. Otros partidos como el Partido Laborista (Ap) y el Partido de la Izquierda Socialista (SV) también permanecen relevantes, aunque con porcentajes más bajos de 17,5% y 9,3%, respectivamente
La evolución del FrP en la política noruega ha sido notable en las últimas décadas. Fundado en 1973, inicialmente como un partido anti-estado de bienestar y anti-inmigración, ha ido adaptando su discurso para captar un electorado más amplio. A lo largo de los años 2000, bajo el liderazgo de figuras como Carl I. Hagen y más tarde Siv Jensen, el FrP ganó terreno al capitalizar las preocupaciones sobre la inmigración y la seguridad social.En 2013, el FrP logró ingresar al gobierno en coalición con el Partido Conservador, lo que consolidó su influencia política. Sin embargo, su apoyo se vio afectado por varios escándalos internos y una gestión de gobierno que algunos votantes consideraron ineficaz. A pesar de estos desafíos, el partido ha logrado recuperar popularidad en los últimos años, especialmente a raíz de la crisis migratoria y las preocupaciones sobre la integración de inmigrantes.
Factores Clave para el Ascenso del FrP
- Inseguridad y Migración: La percepción de inseguridad y la gestión de la inmigración han sido temas centrales que han favorecido al FrP. La retórica del partido ha resonado con una parte significativa del electorado que busca una respuesta más dura ante estos problemas.
- Descontento con Partidos Tradicionales: El descontento hacia los partidos tradicionales ha llevado a muchos votantes a buscar alternativas más radicales, como el FrP, que promete cambios significativos en políticas sociales y económicas.
- Crisis Económica Post-COVID: La crisis económica derivada de la pandemia ha generado incertidumbre entre los ciudadanos noruegos. El FrP ha aprovechado esta situación para presentar propuestas que prometen estabilidad económica y un enfoque más nacionalista.
- Estrategia Electoral Efectiva: La campaña electoral del FrP ha sido efectiva en utilizar plataformas digitales y redes sociales para conectar con los votantes jóvenes y movilizar a sus bases.
El sondeo de Norstat no solo refleja una tendencia hacia la ultraderecha en Noruega, sino que también se inscribe dentro de un fenómeno más amplio observado en Europa, donde partidos similares han ganado terreno en varios países.
Tu opinión
Existen unas normas para comentar que si no se cumplen conllevan la expulsión inmediata y permanente de la web.
EM no se responsabiliza de las opiniones de sus usuarios.
¿Quieres apoyarnos? Hazte Patrón y consigue acceso exclusivo a los paneles.