Hoy se está desarrollando en el Congreso de los diputados la primera sesión de la investidura del candidato a la presidencia del gobierno propuesto por el rey, Pedro Sánchez. El aspirante necesita conseguir, en la votación que se celebrará mañana por la tarde, el apoyo de la mayoría absoluta de la cámara, 176 diputados.
Las sesión comienza a las doce de la mañana con la intervención del líder del PSOE. Tras la pausa para comer, se reanuda a las cuatro de la tarde, y la última intervención del día deberá comenzar, según ha quedado estipulado, antes de las 20:30 horas. Finalizada la sesión de hoy, el debate continuará mañana por la mañana a partir de las nueve, para desembocar en la votación, presumiblemente alrededor de las cinco o las seis de la tarde.
Teniendo en cuenta que a esta hora, aparte de los votos socialistas (123), solo está garantizado el apoyo de un par de diputados más, todo queda en el aire a la espera de que las negociaciones entre el PSOE y Unidas Podemos (42) lleguen a buen puerto. Si para la tarde de mañana, las conversaciones (que, según las filtraciones, se centran ahora en la lucha de Podemos por conseguir ministerios centrales, mientras el PSOE ofrece carteras menores) no fructifican en un acuerdo, habrá que esperar a la sesion del jueves, en la que bastaría que Sánchez lograse más votos favorables que contrarios.
En todo caso, aparte de los votos que ya tiene asegurados y del previsible apoyo final de Unidas Podemos, Sánchez necesitaría para el martes por la tarde (o incluso para el jueves) al menos la abstención de algún o algunos otros grupos con suficiente peso en la cámara. Por ello, todas las miradas se centran en el PNV (7), ERC (15) y Junts per Catalunya (7) , cuya actitud y predisposición inicial resultan muy diferentes. El apoyo del PNV parece, en principio, el más sencillo de conseguir, mientras que el de Junts es de entrada el más difícil.
Pero esa será otra historia, que previsiblemente habría que ventilar el mismo jueves. De momento, mientras no se consiga el voto favorable de Unidas Podemos, todo lo demás pasa a segundo plano. En ese sentido, el debate que esta tarde se entablará entre Pablo Iglesias y Pedro Sánchez puede ser decisivo.
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