Aunque Donald Trump sigue siendo un presidente notablemente impopular, en los últimos meses, y, sobre todo, en las últimas semanas, sus constantes pérdidas de apoyo popular han cesado para, de hecho, comenzar a remontar.
En la última semana se han publicado estudios de Rasmussen y YouGov que sitúan este apoyo ya claramente por encima del 40%, y el promedio de los sondeos está a punto, también, de alcanzar esa cifra.
La sociedad americana parece haberse acostumbrado a su presidente y a sus salidas de tono, de manera que ya no afectan a sus potenciales votantes, sino que, más bien al contrario, en ocasiones desatan oleadas de simpatía entre los suyos, como sucedió con la ocurrencia de llamar “agujeros de mierda” a determinados países.
El fondo electoral y social de Trump está resultando más sólido de lo que parecía en los primeros meses de su mandato. Su imagen está consolidada entre los republicanos, que encuentran muchas dificultades para encontrar dentro de sus filas figuras de relevancia que cuestionen su liderazgo. En el campo demócrata, más allá del rechazo general al presidente, no se vislumbran aún alternativas sólidas que puedan hacerle frente para la campaña electoral que comenzará en poco más de dos años.
@josesalver
Tu opinión
Existen unas normas para comentar que si no se cumplen conllevan la expulsión inmediata y permanente de la web.
EM no se responsabiliza de las opiniones de sus usuarios.
¿Quieres apoyarnos? Hazte Patrón y consigue acceso exclusivo a los paneles.