Los últimos meses han dejado una huella muy negativa en las perspectivas de la población española para el año que comienza. Según un estudio de Sociométrica para El Español, al acabar 2017 los españoles valoraban la evolución del país durante el último año de manera mucho más negativa que a finales de 2016:
Esta visión negativa influye también en las perspectivas para el año que comienza, que han empeorado notablemente frente a lo que se pensaba hace 365 días. Ahora, la gran mayoría de los ciudadanos ( casi 6 de cada diez) opina que iremos a peor, mientas que hace un año apenas 3 de cada diez creían lo mismo.
El estudio también pone de manifiesto otra realidad, y es que las perspectivas económicas y políticas de la población ya no van a la par. Mientras que las sociedad es aún neutral o incluso algo optimista sobre la situación económica del país, es muy negativa sobre la situación política. Esta divergencia explica, quizás, la bajada en la estimación de voto del partido en el gobierno, que ha basado gran parte de su estrategia en poner énfasis en el éxito económico de los últimos años. Da la sensación de que la ciudadanía ya no considera la economía como el factor básico a la hora de valorar si la situación general es buena o mala. Otros hechos, como la cuestión catalana, han tomado el relevo, y llevan a los ciudadanos a inclinarse hacia el pesimismo.
Fuente: El Español
@josesalver
Más que pesimismo yo diría que hay escepticismo.
El ciclo económico a nivel mundial es bueno, pero en España hay pocas posibilidades de un trabajo fijo que puedas tener como soporte para tu vida. Encadenas trabajos precarios, o de autónomo, etc.
Los salarios siguen bajos, y el gobierno lo fía casi todo a la aprobación de presupuestos, algo que en esta legislatura solo se ha producido una vez. Hay que poner de acuerdo a C´s, PNV y los dos partidos canarios para ello y eso es algo cada vez más difícil.
Mientras tanto vemos como se nos escapa entre los dedos la posibilidad de una recuperación real.