La exit poll de RTL/NOS otorga la victoria a D66 (27 escaños), que se sitúa por delante del PVV de Geert Wilders (25)y del VVD (23), confirmando un giro hacia el centro liberal y progresista. El resultado refuerza a la líder Rob Jetten, que consigue recuperar parte del impulso reformista y europeísta de su formación.
Por detrás, la coalición PvdA–GroenLinks (20) mantiene una presencia sólida pero insuficiente para liderar el bloque de izquierda, mientras el CDA (19) conserva su base democristiana pese a un entorno electoral cada vez más polarizado. El populismo de derechas sigue fragmentado entre JA21 (9), FvD (6) y el movimiento agrarista BBB (4).
Las formaciones menores completan un Parlamento atomizado: PvdD (3), SP (3), Denk (3), SGP (3), CU (2), 50+ (2) y Volt (1). NSC se quedaría sin representación, confirmando la dificultad de irrumpir en un sistema cada vez más saturado.
Con un resultado tan ajustado, la formación de gobierno dependerá de acuerdos entre D66, VVD y CDA, a los que podrían sumarse los socialdemócratas y verdes para bloquear la entrada de la extrema derecha. Los Países Bajos encaran así una nueva etapa política marcada por la negociación y la moderación institucional.
Posibles coaliciones
El escenario postelectoral deja abiertas varias fórmulas de gobierno, aunque ninguna sencilla.
1. Coalición centrista-liberal (D66, CDA, VVD, JA21)
Sería la opción más probable a corto plazo, con 78 escaños y una mayoría ajustada. Representaría una alianza entre liberales progresistas, conservadores moderados y la derecha liberal. Su programa giraría en torno a la estabilidad fiscal, la competitividad económica y la transición ecológica, con una aproximación pragmática a la cuestión migratoria.
2. Coalición de centroizquierda (PvdA–GroenLinks, SP, D66, CDA, CU)
Esta alternativa, con unos 71 escaños, dependería del apoyo externo de Volt o PvdD. Reuniría a socialdemócratas, progresistas y democristianos en torno a un programa de inversión social, vivienda y transición verde. Sin embargo, las diferencias ideológicas entre el SP y los partidos de centro podrían complicar las negociaciones.
3. Coalición de derecha (PVV, VVD, CDA, JA21)
Una combinación que alcanzaría 76 escaños, la mayoría exacta, pero con grandes obstáculos políticos. Tanto el CDA como el VVD han mostrado su rechazo a colaborar con Geert Wilders, lo que haría muy difícil su materialización. Aun así, el avance del PVV le otorga un papel relevante en el debate sobre migración y soberanía.
En este contexto, D66 emerge como el actor clave para definir el rumbo de las negociaciones. Cualquier coalición viable dependerá de su capacidad para articular un equilibrio entre la estabilidad económica, la agenda climática y la cohesión institucional del país.

























































































































































































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