Recordemos: Hoy hace 32 años, España y Marruecos firmaban su Tratado de Amistad

El Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación entre España y Marruecos, firmado en Rabat en 1991, sentó las bases para una relación más estrecha y fructífera entre ambos países. Sin embargo, a lo largo de los años, ha habido episodios en los que el respeto a dicho tratado se ha visto desafiado, poniendo a prueba la fortaleza de las relaciones bilaterales.

Uno de los episodios más destacados tuvo lugar en el año 2002, cuando Marruecos decidió emprender una acción unilateral en la isla de Perejil, situada en el Estrecho de Gibraltar y que es objeto de disputa entre ambos países. Marruecos envió tropas a la isla, desafiando el acuerdo de buena vecindad y soberanía establecido en el tratado. Esto provocó una crisis diplomática entre España y Marruecos, que finalmente se resolvió mediante negociaciones y el retiro de las tropas marroquíes.

Otro incidente que generó tensiones entre ambos países ocurrió en 2018, cuando un grupo de migrantes marroquíes intentó cruzar la valla de Ceuta, una de las ciudades autónomas españolas ubicada en territorio norteafricano. Esta situación desencadenó una respuesta contundente por parte de las autoridades españolas para proteger sus fronteras, lo que llevó a un aumento de las tensiones entre los dos países y puso a prueba la cooperación establecida en el tratado.

Además, en el ámbito de la pesca, ha habido disputas periódicas relacionadas con los derechos de pesca en aguas compartidas. A veces, los pescadores marroquíes han denunciado la presencia de embarcaciones españolas en áreas donde el acceso está regulado o limitado por el tratado. Estos desacuerdos han llevado a enfrentamientos y tensiones en la zona pesquera, desafiando los acuerdos de cooperación establecidos en el tratado.

Es importante destacar que, si bien ha habido episodios en los que el tratado no ha sido plenamente respetado, ambos países han demostrado su voluntad de resolver los desacuerdos a través del diálogo y las negociaciones, evitando así una escalada de tensiones. Estos incidentes han servido como recordatorio de la importancia de mantener una comunicación abierta y constante para abordar las diferencias y mantener una relación bilateral saludable.

En conclusión, a pesar de los desafíos ocasionales en el cumplimiento del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación entre España y Marruecos, el acuerdo sigue siendo una piedra angular en las relaciones entre ambos países. A través del respeto mutuo, la cooperación continua y la búsqueda de soluciones diplomáticas.