La Embajada de Rusia pide a España “explicar qué gana” con “no reconocer las legítimas preocupaciones” de Moscú

La Embajada de Rusia ha pedido este miércoles a España “explicar qué gana” con “no reconocer las legítimas preocupaciones” del país euroasiático en materia de seguridad, después de que el embajador, Yuri Korchagin, fuera convocado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación por la escala del conflicto en Ucrania.

En un comunicado, la Embajada rusa en España ha detallado que Korchagin ha sido convocado al Ministerio de Exteriores este miércoles y, en la reunión, “ha sido informado de la postura de España sobre el reconocimiento por parte de Rusia” de las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk.

Al respecto, el embajador ruso ha explicado la postura oficial de Rusia y ha pedido a España “explicar qué gana con no reconocer las legítimas preocupaciones de Rusia, relacionadas con las cuestiones de principio de seguridad” del país. “Esperamos recibir la respuesta”, han trasladado.

Las preocupaciones de Moscú en materia de seguridad son que la OTAN no se amplíe hacia el este, que no se desplieguen sistemas de armamento ofensivos en las fronteras con Rusia y volver a la configuración de fuerzas e infraestructuras del momento de la firma del Acta Fundacional Rusia – OTAN de 1997. Moscú considera que han sido “ignoradas” durante estos meses en los que la tensión en Ucrania ha sido creciente.

El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha convocado a Korchagin para trasladarle el rechazo del Gobierno a las “acciones unilaterales” de Rusia. Después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, reconociera el lunes la independencia de las regiones separatistas ucranianas de Donetsk y Lugansk, “no es descartable” que Rusia invada a Ucrania, advirtiendo de que Europa, y con ella España, se enfrenta a su “mayor amenaza” desde la Segunda Guerra Mundial, ha advertido.

Varios países europeos ya procedieron la víspera a convocar a los embajadores o encargados de negocios de Rusia en sus respectivas capitales en protesta por la decisión de Putin.