Sánchez, su mujer, varios ministros y el PSOE demandan a Aldama como paso previo a querellarse

El PSOE ha presentado este viernes la demanda en la que solicita el acto de conciliación previo a la querella criminal conjunta por injurias y calumnias contra el presunto conseguidor del ‘caso Koldo‘, el empresario Víctor de Aldama, tras su declaración voluntaria ante el juez de la Audiencia Nacional.

La demanda se ha interpuesto en representación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez; los ministros Ángel Víctor Torres y María Jesús Montero, y su jefe de Gabinete, Carlos Moreno; el exministro y presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el secretario de Organización de los socialistas, Santos Cerdán.

En la demanda, el PSOE ha reclamado la solicitud para la celebración de un acto de conciliación previo a la interposición de querella criminal por un presunto delito de injurias y calumnias, al amparo del artículo 804 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal y los artículos 139 y siguientes de la Ley de Jurisdicción Voluntaria.

Para los socialistas, las manifestaciones del empresario son “absolutamente falsas, difamatorias, injuriosas y calumniosas”, pues atentan “de manera absolutamente grave contra el honor de importantes miembros del Gobierno y del PSOE” y a Begoña Gómez, “con una clara intencionalidad de afectar” también al Ejecutivo en su conjunto y al partido.

En sus argumentos, el PSOE señala que la confesión de De Aldama es “premeditada, torticera y de una absoluta gravedad”, que se han realizado “con fines absolutamente espurios” y con una “evidente finalidad política” que, según señalan, desconocen “si obedecen a intereses exclusivamente propios o también de terceros, así como si se han efectuado ‘motu propio’ o a cambio de precio, recompensa o promesa”.

“Pero que en cualquier caso –reiteran en la demanda– no pueden ampararse fraudulentamente en el derecho de defensa, que permite la mentira en favor propio, pues ante la palmaria gravedad y transcendencia pública de las mismas, no pueden quedar amparadas en la impunidad por pronunciarse dentro de un procedimiento en curso”, subrayan.

Por ello, en el PSOE entienden que las declaraciones pueden tratarse de unas injurias y calumnias recogidas en el artículo 205 y 208 del Código Penal, y que, además, “revisten también del carácter de delitos públicos realizadas contra las mencionadas autoridades en el ejercicio de sus cargos”.

Así, los demandantes, a título personal, y el PSOE, como persona jurídica, presentan esta acción previa a interponer la correspondiente querella penal al empresario por su declaración, por la que reclama a De Aldama que “se retracte de lo manifestado, comprometiéndose a cesar de forma inmediata toda actividad tendente a dañar el prestigio, la imagen y el honor“.

ACUSACIONES AL PSOE
En la víspera, Aldama declaró a petición propia ante el juez y acusó a Torres de pedir 50.000 euros a la trama, al secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, de recibir un sobre con 15.000 euros, y al jefe de Gabinete de la vicesecretaria general, María Jesús Montero, Carlos Moreno, de quedarse con otros 25.000 euros.

También mencionó al presidente Sánchez, y trató de desmentirle al señalar que sí le conocía y pidió hablar con él en un acto del PSOE para felicitarle por gestiones que realizaba en México. Sobre Illa dijo que tenía previsto acudir a una cena con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, en su viaje a España.

Aldama se refirió además a la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, y dijo que se había reunido con ella y con la mujer del presidente, Begoña Gómez, para hablar sobre la España vaciada. Asimismo, el conseguidor nombró al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a quien atribuyó el conocimiento del viaje a España de Delcy Rodríguez. Sin embargo, estos últimos no están incluidos en la querella.