Surinam: sorpresa y empate técnico en las legislativas

Las elecciones generales de Surinam, celebradas ayer, han marcado un punto de inflexión en el panorama político del país, reflejando tanto la continuidad de las dinámicas étnicas como un cambio significativo en el equilibrio de poder entre los principales partidos. Con un total de 231,348 votos escrutados, los resultados provisionales muestran una contienda reñida que subraya la fragmentación política y la necesidad de coaliciones para formar gobierno.

Resultados Electorales: Un Empate Técnico con Sorpresas

El Partido Nacional Democrático (NDP) lideró con 78,261 votos (33.83%), obteniendo 18 escaños en la Asamblea Nacional de 51 miembros. Le siguió de cerca el Partido Reformista Progresista (VHP), del presidente saliente Chan Santokhi, con 75,305 votos (32.55%) y 17 escaños. Este resultado representa un empate técnico, ya que ninguno de los dos partidos alcanzó la mayoría necesaria de 34 escaños para elegir al presidente sin negociar con otras fuerzas políticas.

El Partido de Liberación y Desarrollo (ABOP) y el Partido Nacional de Surinam (NPS) empataron con 25,921 y 25,901 votos respectivamente (11.2% cada uno), asegurando 6 escaños por partido. El Pertjajah Luhur (PL) obtuvo 9,149 votos (4%) y 2 escaños, mientras que Alternativa 2020 (A20) y la Hermandad y Unidad en Política (BEP) lograron 6,162 y 6,199 votos (2.7% cada uno), con 1 escaño cada uno. Otros partidos, como DA’91, DNL y OPTSU, no alcanzaron el umbral para obtener representación.

Comparado con las elecciones de 2020, donde el VHP dominó con 20 escaños y el NDP cayó a 16, los resultados de 2025 indican un resurgimiento del NDP y una leve pérdida de apoyo para el VHP. El ABOP, que había obtenido 8 escaños en 2020, perdió terreno, mientras que el NPS duplicó su representación desde los 3 escaños de 2020.

Ideologías y Representación Étnica

En Surinam, los partidos políticos suelen estar más alineados con intereses étnicos que con ideologías estrictas, lo que refleja la diversidad cultural del país:

NDP (Socialdemocracia): Históricamente multiétnico, ha promovido políticas de bienestar social, pero su liderazgo bajo Desi Bouterse (2010-2020) estuvo marcado por controversias, incluyendo acusaciones de corrupción y crímenes. Su recuperación en 2025 sugiere un apoyo persistente entre votantes que valoran su enfoque asistencialista, a pesar de su pasado.
VHP (Centro-izquierda): Tradicionalmente ligado a la comunidad hindustaní, se ha transformado en un partido multiétnico bajo Chan Santokhi. Su gobierno (2020-2025) enfrentó críticas por medidas de austeridad impuestas por acuerdos con el FMI, alta inflación y una percepción de lentitud en la lucha contra la corrupción, lo que podría explicar su leve retroceso.
ABOP (Pragmatismo, intereses cimarrones): Representa a los afrodescendientes (cimarrones). A pesar de ser parte de la coalición gobernante con el VHP, su caída de 8 a 6 escaños refleja una posible insatisfacción con su desempeño en el gobierno y el impacto del nuevo sistema electoral, que eliminó los distritos electorales a favor de un único distrito nacional tras un fallo del Tribunal Constitucional en 2022.
NPS (Centro-izquierda): Popular entre afrosurinameses, su crecimiento de 3 a 6 escaños indica un resurgimiento, posiblemente capitalizando el descontento con la coalición VHP-ABOP. Su enfoque en la democracia y el desarrollo social ha ganado tracción.
PL (Centro-izquierda): Enfocado en la comunidad javanesa, mantuvo sus 2 escaños, pero su influencia sigue limitada tras la disolución de la alianza con ABOP.
A20 (Centro-derecha): Con un discurso cristiano y antiétnico, busca superar las divisiones raciales, pero su impacto sigue siendo marginal con 1 escaño.
BEP (Intereses cimarrones): Similar al ABOP, representa a los afrodescendientes y mantuvo un escaño, mostrando una base de apoyo estable pero pequeña.

Evolución Política y Coaliciones

La política de Surinam ha evolucionado desde la independencia en 1975, pasando de gobiernos autoritarios (como el de Bouterse en los 80) a una democracia más consolidada, aunque marcada por tensiones étnicas y económicas. Las elecciones de 2020 habían dado al VHP una victoria clara, permitiéndole formar una coalición con ABOP, NPS y PL, que desplazó al NDP de Bouterse. Sin embargo, la gestión económica de Santokhi, con medidas de austeridad y alta inflación, generó descontento, lo que el NDP aprovechó para recuperar terreno.

El nuevo sistema electoral, con un único distrito nacional, ha favorecido a partidos con apoyo más amplio como el NDP y el VHP, mientras que partidos regionalmente fuertes como el ABOP han perdido influencia. Esto podría incentivar una mayor cohesión nacional en el futuro, pero también pone presión sobre las coaliciones, ya que los partidos pequeños (NPS, ABOP, PL, A20, BEP) serán clave para formar gobierno.

El NDP y el VHP, con 18 y 17 escaños respectivamente, necesitarán al menos 34 votos para elegir al presidente. Una coalición entre el VHP y sus socios actuales (ABOP, NPS, PL) sumaría 32 escaños, requiriendo el apoyo de A20 o BEP para alcanzar la mayoría. Alternativamente, el NDP podría buscar una alianza con ABOP y NPS, aunque las tensiones históricas entre el NDP y otros partidos, especialmente tras el gobierno de Bouterse, hacen esta opción menos probable.