A menos de un mes para las elecciones alemanas del 24 de septiembre, hay poca incertidumbre sobre cuál va a ser el resultado general, pero mucha sobre las futuras coaliciones de gobierno.
Los aproximadamente 630 miembros del Bundestag (su cámara de diputados), resultan elegidos por un sistema muy proporcional entre todos aquellos partidos que superen el 5% de votos a nivel nacional. Éstos a su vez nombrarán al canciller para un período de cuatro años.
La CDU/CSU de Angela Merkel conserva una cómoda ventaja sobre el SPD de Schulz, que de hecho no solo no remonta sino que parece perder peso poco a poco. No obstante, como Merkel está lejos de una hipotética mayoría absoluta, en lo que todos piensan es en las posibles coaliciones posteriores.
En el último año la evolución del promedio de encuestas ha sido esta, según Pollytix:
El efecto de la elección de Schulz a principios de año como líder socialdemócrata se desavaneció pronto. Su partido no ha vuelto a recuperar posiciones, y de hecho sigue bajando.
Fuente: http://www.wahlrecht.de
Los dos partidos principales tienen expectativas algo inferiores que hace cuatro años, pero en general siguen en su misma línea. Lo importante está en otro lado: en la barrera electoral del 5% de los votos. Quienes no alcancen esa cifra resultan excluidos automáticamente del reparto proporcional de escaños en el parlamento, salvo que consigan al menos tres diputados en las circunscripciones uninominales, cosa que no está al alcance de ninguno de los partidos menores. Por lo tanto, varios millones de votos se pueden perder. De momento, los verdes (Grüne), los Liberales (FDP), la izquierda (Die Linke) y los ultraderechistas (AfD) parecen tener garantizado alcanzar ese 5%, pero no es descartable que alguno de ellos quede fuera. Si así ocurriera, el equilibrio de fuerzas se vería alterado, porque varios millones de votos quedarían fuera del reparto de diputados, y algunas coaliciones que ahora mismo parecen estar lejos de conseguir el 50% de los escaños, podrían llegar a alcanzarlos.
Todo parece indicar que Alemania optará por un bipartidismo imperfecto (2+4), con dos grandes partidos y seis grupos en el parlamento. Si así fuera, el juego de las posibles coaliciones a la vista de la media de encuestas actual, sería el siguiente:
La coalición más estable, que superará, sin duda, el 50% de los votos, sería la reedición del gran acuerdo entre democristianos y socialdemócratas (CDU+SPD). No obstante, parece que en esta ocasión todos desearían que se pudiera buscar una mayoría alternativa. Las más prometedoras combinaciones son:
- Coalición “Jamaica”. Reuniría al grupo de Merkel con liberales y verdes. Todas las encuestas le dan una mayoría más que suficiente, y goza de precedentes en varios Lander y acuerdos locales.
- Coalición de la CDU de Merkel con los derechistas del AfD. Es muy improbable, porque AfD es un partido sistemáticamente vetado por todos los demás grupos políticos.
- Coalición de la CDU con los liberales. Es la apuesta favorita de muchos, aunque según las encuestas actuales no conseguiría (por muy poco) alcanzar el 50% de los escaños. No obstante, si alguno de los otros partidos menores no llegara finalmente al 5% de los votos, es probable que la suma CDU+FDP sí alcanzara el ansiado 50% del Bundestag.
- Coalición CDU+Verdes. Aunque pudiera parecer extraña, la combinación ya ha sido ensayada, y los verdes han ido asumiendo un papel “central” en la política alemana que la haría posible. Sus posibilidades, matemáticamente hablando, son parecidas o algo inferiores a las de la coalición CDU+FDP.
- Coalición de izquierdas. Esta alternativa, que hace unos meses parecía alcanzable, se ha ido desinflando a la vez que el SPD. En estos momentos, a los partidos que la integrarían les faltan varios puntos porcentuales para que sea factible. Solo un vuelco considerable durante las próximas semanas permitiría que estuviera sobre el tapete.
- Coalición de los socialdemócratas con los verdes y los liberales. Es tan improbable como la anterior.
A falta de menos de un mes para las elecciones aún pueden cambiar las cosas. Tenemos demasiados ejemplos en el pasado de elecciones cuyos resultados parecían cantados y que finalmente terminaron de manera sorprendente. Estaremos atentos, porque gran parte del futuro de Europa se juega el 24 de septiembre en Alemania.
Tu opinión
Existen unas normas para comentar que si no se cumplen conllevan la expulsión inmediata y permanente de la web.
EM no se responsabiliza de las opiniones de sus usuarios.
¿Quieres apoyarnos? Hazte Patrón y consigue acceso exclusivo a los paneles.