Puigdemont abre la puerta a un acuerdo con el PP para tumbar los presupuestos de Sánchez

El expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha abierto la puerta a un acuerdo con el Partido Popular (PP) para tumbar los presupuestos del Gobierno de Pedro Sánchez si no se cumplen los compromisos.

Según informa el diario Politico, Puigdemont mantuvo una conversación con el presidente del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, en la que le comentó que su partido, Junts per Catalunya, estaría dispuesto a pactar con el PP de Alberto Núñez Feijóo para derrocar al Ejecutivo de Sánchez.

En la conversación, Puigdemont desestimó las críticas de Weber a su acuerdo con Sánchez, y argumentó que “un referéndum consultivo” sobre la independencia catalana era posible si se acordaba políticamente.

Weber, por su parte, argumentó que el impulso independentista de Junts sólo inflamaría a Vox: “de hecho, ambos se están alimentando mutuamente”.

Puigdemont le dijo a Weber que incluso podría imaginar un acuerdo con el PP para derrocar al gobierno de Sánchez a mitad de su mandato con una moción de censura.

“Si no hay avances suficientes” con el PSOE en las negociaciones para el reconocimiento de Cataluña como nación, “podríamos votar con el PP para derribar el presupuesto… o por una resolución sobre Israel, donde nuestra posición en realidad está más alineada”, confirmó Puigdemont a Politico.

Las declaraciones de Puigdemont suponen un giro radical en la política catalana. Hasta ahora, Junts per Catalunya había mantenido una postura de rechazo frontal al PP, al que consideraba un obstáculo para el avance del proceso independentista.

Sin embargo, la situación política en España ha cambiado radicalmente en los últimos meses. El PP, liderado por Alberto Núñez Feijóo, ha moderado su discurso y ha abierto la puerta a un diálogo con el independentismo.

En este contexto, Puigdemont parece estar dispuesto a explorar nuevas vías para avanzar en su objetivo de la independencia de Cataluña. Un acuerdo con el PP sería un movimiento muy arriesgado, pero también podría ser muy eficaz para desestabilizar al gobierno de Sánchez.