El president de la Generalitat acaba de comunicar el cese de tres de los consejeros de su gobierno, Miquel Buch, Maria Àngela Vilallonga y Àngels Chacón, y su sustitución al frente de Interior, cultura y empresa por Miquel Sámper, Àngels Posa i Roca, Ramon Tremosa.
La “mini crisis” operada en la Generalitat tiene relación directa con los problemas en el entorno de Junts y el PDeCat, con abandonos masivos de militancia en esta última formación, que tendría problemas para mantener un mínimo de disciplina frente al “Junts” que lidera Puigdemont.
Dos de los nuevos miembros del ejecutivo catalán (Samper y Tremosa) tomarán posesión esta misma tarde, mientras que la tercera (Ponsa) lo hará la semana que viene.
La decisión de Torra se interpreta como un intento de ganar consistencia en el ejecutivo ante las disensiones surgidas, e implicaría, dentro de lo imprevisible que es la política catalana, que la siempre inminente convocatoria de elecciones ya no es tal, y que el horizonte electoral podría extenderse fácilmente a bien entrado 2021.
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