Hoy, 29 de octubre de 2023, Turquía celebra el centenario de su República. Un siglo de historia que ha estado marcado por grandes logros y fuertes desafíos, en un país situado entre dos continentes, puente entre oriente y occidente.
El nacimiento de una nueva nación
La caída del Imperio Otomano, uno de los imperios más longevos de la historia, marcó un punto de inflexión en la geopolítica del siglo XX. Con su origen en el siglo XIV, ya había perdido gran parte de su antigua gloria en los siglos anteriores a su caída.Sin embargo, el proceso de descomposición se aceleró con su participación en la Primera Guerra Mundial como parte de las Potencias Centrales, lo que lo llevó a enfrentar a las potencias aliadas.
Algunas de las fechas clave que marcaron el futuro del Imperio Otomano fueron:
- 1683 – El asedio de Viena: Aunque la decadencia del Imperio Otomano comenzó mucho antes, el asedio de Viena en 1683 marcó un punto de inflexión crucial. Las fuerzas otomanas, bajo el liderazgo del Gran Visir Kara Mustafa, sitiaron la ciudad, pero finalmente fueron derrotadas por una coalición europea liderada por el rey polaco Juan III Sobieski. Este evento debilitó significativamente la posición otomana en Europa central y marcó el comienzo de una serie de derrotas militares.
- Siglo XIX – El período de las reformas: A lo largo del siglo XIX, el Imperio Otomano emprendió una serie de reformas en un esfuerzo por modernizarse y adaptarse a las presiones europeas. Estas reformas incluyeron cambios en el sistema legal, militar y administrativo, así como la abolición de prácticas como la esclavitud. Sin embargo, estas reformas resultaron insuficientes para frenar la decadencia del imperio.
- 1878 – El Tratado de San Stefano: Tras su derrota en la Guerra Ruso-Turca de 1877-1878, el Imperio Otomano se vio obligado a firmar el Tratado de San Stefano, que puso fin a la guerra. Este tratado otorgó a Bulgaria y otras naciones de los Balcanes su independencia, lo que significó la pérdida de vastos territorios otomanos en Europa.
- 1918 – Armisticio de Mudros y Tratado de Sèvres (1920): El 30 de octubre de 1918, el Imperio Otomano finalmente firmó el Armisticio de Mudros, poniendo fin a su participación en la Primera Guerra Mundial. Tras el armisticio, el Imperio Otomano fue desmembrado. El Tratado de Sèvres, firmado en 1920, estableció las condiciones para la desaparición del imperio y la creación de naciones independientes en su lugar, como Turquía, Grecia y otras. Este tratado llevó a la abolición del sultanato otomano y el exilio del último sultán, Mehmed VI.
El líder turco Mustafa Kemal Atatürk emergió como una figura central en la lucha por la independencia, lo que eventualmente llevó a la creación de la República de Turquía en 1923. Esta transformación marcó el colapso del Imperio Otomano, y el tratado de Sèvres de 1920 confirmó su desaparición definitiva, dando lugar a un nuevo capítulo en la historia de Turquía y la región.
La caída del Imperio Otomano también tuvo un impacto significativo en Oriente Medio y los Balcanes, ya que los tratados posteriores al conflicto reconfiguraron las fronteras y dieron lugar a la creación de nuevos estados y mandatos coloniales.
Ataturk: el padre de la patria
Mustafa Kemal Ataturk es una figura central en la historia de Turquía. Es considerado el padre de la patria y su legado sigue siendo muy importante para el país.
Ataturk nació en 1881 en Selanik, en el Imperio Otomano. Se unió al ejército otomano y luchó en la Primera Guerra Mundial. Tras la derrota del Imperio, Ataturk lideró la Guerra de Independencia Turca, que resultó en la fundación de la República de Turquía.
Fue un líder carismático y visionario. Se propuso modernizar Turquía y convertirla en un estado occidental y laico. Bajo su liderazgo, se llevaron a cabo una serie de reformas radicales, que transformaron el país profundamente. Algunas de estas medidas han sido retrocedidas parcialmente por Erdogan.
Ataturk murió en 1938. Su legado sigue siendo muy importante el país, es considerado un héroe nacional y su imagen aparece en todos los billetes y monedas.
Las reformas de Ataturk
Las reformas que impulsó Ataturk se centraron en los siguientes ámbitos:
- Política: La República de Turquía es un estado laico, en el que la religión y el Estado están separados.
- Economía: Se introdujo una economía de mercado y se fomentó la industrialización.
- Educación: Se estableció un sistema educativo secular y se promovió la alfabetización.
- Cultura: Se adoptó el alfabeto latino y se promovió el desarrollo de la cultura turca.
Los logros de la República de Turquía
Un siglo después, Turquía ha logrado grandes avances en todos los ámbitos, aunque sigue teniendo varias asignaturas pendientes como la creciente islamización o el retroceso en derechos de las minorías y del colectivo LGTBIQ+.
- Economía: Turquía ha experimentado un crecimiento económico significativo, convirtiéndose en una de las economías emergentes más importantes del mundo.
- Demografía: La población ha pasado de 13 millones en 1923 a 84 millones en 2023.
- Educación: La tasa de alfabetización ha pasado del 10% en 1923 al 98% en 2023.
- Cultura: El país ha desarrollado una rica cultura moderna, que combina elementos tradicionales y occidentales.
Los desafíos de la República de Turquía
A pesar de sus logros, la República de Turquía también se enfrenta a una serie de desafíos.
- Conflicto kurdo: Turquía se enfrenta a un conflicto de larga duración en el sur del país, con el movimiento kurdo separatista.
- Problemas económicos: Tras años de bonanza, el país ha visto aflorar una serie de problemas económicos, como la alta inflación y la gran desigualdad.
- Amenazas externas: Turquía afronta también amenazas externas, como la inestabilidad en la región y la presión migratoria y su relación con los países occidentales (particularmente tensa con sus vecinos griegos).
Erdogan y sus 20 años en el poder
Recep Tayyip Erdogan, un líder carismático y controvertido, ha ejercido un poder político significativo en Turquía desde el año 2003. Durante su mandato como Primer Ministro y, posteriormente, como Presidente de Turquía, Erdogan ha liderado una serie de reformas políticas y económicas que han transformado el país en varios aspectos. Sin embargo, su gobierno también ha sido objeto de críticas significativas por su impacto en los derechos humanos y las libertades civiles en Turquía.
Uno de los aspectos más preocupantes de su gobierno ha sido la restricción de la libertad de prensa. Erdogan ha sido acusado de reprimir a medios de comunicación críticos y de consolidar su control sobre las agencias de noticias y canales de televisión. Esto ha llevado a la censura y la autocensura en la prensa turca, lo que ha socavado la diversidad de opiniones y la libre expresión en el país.
Otro tema espinoso es la persecución de la oposición política y la purga en el sector público. Tras el intento de golpe de Estado en 2016, el gobierno de Erdogan llevó a cabo una gran purga que resultó en la detención de miles de personas, incluyendo jueces, profesores, periodistas y funcionarios gubernamentales, bajo cargos de participación en el golpe o afiliación a grupos considerados terroristas. Estas detenciones han suscitado preocupaciones sobre la justicia y la imparcialidad del sistema legal en Turquía.
Además, la política exterior de Erdogan ha sido objeto de controversia, especialmente en relación con la intervención en Siria y la relación con las potencias occidentales. Su postura en asuntos internacionales, como la compra de sistemas de defensa antiaérea rusos y el acercamiento a países de la esfera de Rusia, ha tensado las relaciones con sus aliados tradicionales en la OTAN.
La involución en los derechos y las libertades civiles en Turquía es una preocupación que ha sido expresada por organizaciones internacionales de derechos humanos y gobiernos extranjeros. A pesar de las críticas, Erdogan ha logrado mantener su posición y apoyos en el país.
Una relación complicada con la UE
El deseo de Turquía de ingresar a la Unión Europea (UE) ha sido un tema importante en la política turca y las relaciones exteriores durante varias décadas. Turquía solicitó formalmente la membresía en la Comunidad Económica Europea (antecesora de la UE) en 1987, y las negociaciones oficiales para la adhesión comenzaron en 2005. Esta ambición de unirse a la UE se ha basado en la creencia de que su ingreso proporcionaría a Turquía beneficios económicos, políticos y de seguridad, al mismo tiempo que confirmaría su posición como un actor importante en el escenario internacional.
Sin embargo, el proceso de adhesión de Turquía a la UE ha estado plagado de obstáculos, lo que ha llevado a avances lentos y, en ocasiones, estancamiento en las negociaciones. Cuestiones relacionadas con los derechos humanos, la democracia, la libertad de prensa y otros asuntos políticos y sociales han generado tensiones entre Turquía y la UE. El camino hacia la membresía plena en la UE sigue siendo incierto y ha llevado a un debate en curso tanto en Turquía como en Europa sobre si la adhesión es factible y en qué términos se lograría.
Tu opinión
Existen unas normas para comentar que si no se cumplen conllevan la expulsión inmediata y permanente de la web.
EM no se responsabiliza de las opiniones de sus usuarios.
¿Quieres apoyarnos? Hazte Patrón y consigue acceso exclusivo a los paneles.