Las elecciones municipales en Renania del Norte-Westfalia, celebradas este domingo en segunda vuelta, han dejado un panorama político que consolida a los partidos tradicionales y refuerza el aislamiento de la extrema derecha. AfD, que aspiraba a capitalizar el descontento social en las grandes urbes del Land más poblado de Alemania, no ha logrado imponerse en ninguna ciudad y se enfrenta a un nuevo revés estratégico.
Resultados en las grandes ciudades
En Münster, los Verdes lograron mantener la alcaldía con un cómodo 57,9% frente al 42,1% de la CDU. En Essen, en cambio, los democristianos consolidaron su posición con un 57,1% frente al 42,9% del SPD. Bochum ofreció la contrapartida, con el SPD imponiéndose claramente al CDU (64,7% frente a 35,3%).
Hagen fue una de las plazas más observadas, dado que AfD consiguió pasar a la segunda vuelta. Sin embargo, el candidato democristiano se impuso con un contundente 71,7% frente al 28,3% de la extrema derecha. Una situación similar se dio en Duisburgo, donde el SPD arrasó con un 78,6% frente al 21,4% de AfD, reforzando el “cordón sanitario” que ha dejado a la formación sin opciones de gobierno local.
En Dortmund, la CDU se impuso por un estrecho margen sobre el SPD (52,9% frente a 47,1%), mientras que en Bielefeld la diferencia fue aún menor: 51,4% frente a 48,6%. En Wuppertal, los socialdemócratas mantuvieron con holgura la alcaldía (74,6% frente a 25,4% de la CDU), y en Solingen y Leverkusen se registraron victorias ajustadas de la CDU frente al SPD.
El caso de Colonia fue especialmente relevante. Allí, la segunda vuelta enfrentaba a los socialdemócratas con los Verdes. Finalmente, el SPD consiguió arrebatar la alcaldía con un 53,5%, frente al 46,5% de los ecologistas, que retroceden respecto a los resultados obtenidos en 2020.
Lectura política
Los resultados muestran una clara división territorial y social entre bastiones socialdemócratas y democristianos, con los Verdes manteniendo posiciones relevantes, aunque a la baja en plazas estratégicas. La derrota de AfD en todas las ciudades donde logró concurrir a la segunda vuelta consolida el rechazo mayoritario de los votantes urbanos hacia la extrema derecha, pese a que las encuestas regionales apuntan a un crecimiento de la formación en áreas rurales e industriales.
Para el SPD, la recuperación de Colonia supone un golpe de efecto en el Land más poblado del país y un balón de oxígeno para su dirección nacional, que atraviesa dificultades de popularidad. Para la CDU, las victorias en Essen, Dortmund, Bielefeld y Solingen refuerzan su imagen de partido de gobierno local, aunque no consigue romper la tendencia a la fragmentación en las grandes urbes.
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