Los datos semanales marcan un enorme aumento durante la última semana de la incidencia de la pandemia en Europa. Tanto que España, con una incidencia que no baja, sino que está estancada, desciende muchos puestos y casi deja de estar incluida en el listado de los 14 estados más afectados.
Los fallecimientos, lógicamente, van con retraso respecto a los nuevos casos detectados, y reflejan más que la incidencia actual, la del mes pasado, por lo que España mantiene aún cifras altas.
En el histórico desde el inicio de la pandemia, queda patente el gran acelerón de las últimas semanas. La segunda ola está en pleno desarrollo.
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