El Tribunal Supremo tampoco da la razón a Trump

Todas las esperanzas de Donald Trump se cifran en que, a pesar de los reveses judiciales sufridos en instancia inferiores, finalmente el Tribunal Supremo pueda revertir la situación.

Pero el tiempo se acaba y la situación parece ir ya definitivamente hacia el lado contrario de sus pretensiones. Ayer a última hora se supo que el Tribunal Supremo, integrado por nueve miembros, de mayoría conservadora, y con tres nombrados directamente por el presidente a lo largo de su mandato, tampoco le daba la razón en cuanto a las medidas cautelares solicitadas para Pennsylvania.

El TS rechazó la petición republicana de revertir la victoria del presidente electo Joe Biden en Pensilvania, basada en la solicitud de no tener en cuenta unos 2.500.000 votos emitidos por correo en ese estado. La decisión es importante en sí misma, porque estamos apenas a cinco días de la proclamación definitiva del triunfo electoral, programada para el 14 de diciembre, y a Trump ya no le quedan prácticamente opciones. Es importante también el hecho de que se anunció sin hacer constar ni un solo voto discrepante. La orden del tribunal es extraordinariamente escueta, y señala que: “La solicitud de medidas cautelares presentada al juez Alito y por él remitida al tribunal es denegada”.

Es la primera vez que la Corte Suprema norteamericana interviene en un asunto relacionado con las elecciones del 2020, y, de haber alguna otra resolución, debería producirse con urgencia extrema teniendo en cuenta que la proclamación del Colegio Electoral debe llevarse a cabo el próximo lunes. En el estado actual del recuento, Biden tiene consolidados casi 81.300.000 votos (306 votos electorales) frente a algo más de 74.200.000 de su rival (232).

Quedan pendientes algunas otras demandas sobre Texas y algún otro estado, pero no parece nada probable que influyan en el resultado, máxime cuando casi todos los estados realmente litigiosos están ya decididos.