Galicia 2016: unas elecciones entre viento y marea.

Galicia será, junto con Euskadi, una de las dos Comunidades Autónomas que celebrarán elecciones este año, nuevas generales o sorpresas aparte. Sin duda, estarán marcadas por el nuevo panorama político que nos machaca día a día desde la primavera de 2014. Si bien varios analistas opinan que ese cambio se inició con AGE (De Beiras a Podemos, Anxo Lugilde, 2014), la coalición de nacionalistas y EU que irrumpió como 3ª fuerza en el Pazo do Hórreo en Octubre de 2012; estos serán los primeros comicios en los que las nuevas fuerzas a nivel estatal se centren en Galicia durante una campaña.

Como comentábamos antes, este “temporal” empezó a percibirse en 2012, pero fue la primavera pasada cuando tocó tierra definitivamente: Las candidaturas de las “Mareas” consiguieron los bastones de mando de 3 de las 7 ciudades gallegas (las más importantes de la Provincia de A Coruña) aupando a Martiño Noriega, Xulio Ferreiro y Jorge Suárez a las alcaldías de Santiago de Compostela, A Coruña y Ferrol respectivamente.

El tradicional tripartidismo gallego (PP-PSdG-BNG) solamente pudo salvar sus mayorías en Ourense, Vigo y Pontevedra. Esta tendencia se vio reforzada con el sorprasso de la coalición En Marea a los socialistas, la caída de 200.000 votos y 5 escaños del PP y un BNG que perdió dos de cada tres votos recibidos en 2011 dentro de la coalición Nós-Candidatura Galega.

La primera incógnita que se cierne sobre estas elecciones es su fecha, y es que a pesar de estar previstas para finales de octubre, se ha especulado mucho sobre un adelanto electoral para reducir el impacto de nuevos recortes y dejar a la oposición sin capacidad de organizarse (como ocurrió en el adelanto de las de 2012, de 5 meses) o bien para cubrir una posible marcha del presidente Feijóo a Madrid.

Esta posibilidad nos lleva a las dudas en el partido hegemónico desde los 80 y del gobierno (única comunidad con mayoría absoluta desde el 24M). El PPdG ha sufrido fuertes varapalos electorales, ya no solo al perder las alcaldías citadas anteriormente, sino también al perder las 3 diputaciones costeras y multitud de pequeños pueblos y villas a través de pactos entre PSdG, nacionalistas y plataformas vecinales. En este contexto el líder de los populares gallegos ha iniciado los congresos provinciales del partido para renovar sus órganos, siendo su Vicepresidente, Alfonso Rueda; el elegido para ocupar la presidencia del PP en Pontevedra, mientras que para A Coruña suena con fuerza Agustín Hernández, que llegó a ser alcalde de Compostela en el tramo final de la legislatura después del baile de ediles debido a las imputaciones de la trama Pokemon.

Estos movimientos nos pueden servir para entender la preocupación dentro del partido, poniendo a caras nuevas pero con buen perfil al frente. La única duda que queda es saber quién liderará esa lista, todos señalan que Alberto Núñez Feijóo es el mejor candidato posible, y prácticamente el único capaz de revalidar la mayoría absoluta; pero nadie se atreve a afirmar que será el candidato. El de Os Peares tiene muy buena consideración en Génova 13 y muchos lo sitúan como sucesor de Rajoy. Incluso él mismo ha rechazado prometer que se presentará, diciendo que su contrato con la comunidad finaliza este año y decidirá a partir de Marzo si lo renueva o no.

Por su parte, en el PSdG las cosas no están mucho más claras: el Secretario Xeral desde septiembre de 2013 tras la renuncia de Pachi Vázquez, Xose Ramón Gómez Besteiro; se encuentra imputado desde julio del año pasado, y todo parece indicar que su futuro político estará ligado al judicial. Los socialistas gallegos, que han perdido desde la victoria de Zapatero en 2008 más de 400.000 apoyos (más de la mitad); carecen de líderes capaces de disputar la Xunta; ya que el otro hombre fuerte del partido, Abel Caballero; ya ha dejado claro que su carrera política se limita a Vigo hasta que pierda en las urnas.

El BNG sin embargo es el que presenta más dudas. Después del fracaso de Nós-CG al no obtener representación, la formación frentista encara el próximo 28 de febrero una Asamblea Xeneral para renovar su Consello Nacional tras la dimisión del actual portavoz Xavier Vence, y que se prevé aún más traumática que la de Amio en 2012 que desembocó en la escisión de Encontro Irmandiño liderada por Xose Manuel Beiras y que dio origen a A Nova-Irmandade Nacionalista y Máis Galiza de Xoán Bascuas con Compromiso por Galicia.

Dentro de la histórica formación hay dos corrientes ahora mismo: la UPG (Unión do Povo Galego) que es la mayoritaria desde la constitución en 1982 del BNG y normalmente considerado el “núcleo duro” del mismo, y los independientes junto con Movemento Galego ao Socialismo. Mientras que los primeros, representados por pesos pesados dentro del Bloque como Francisco Rodríguez (ex-diputado en Cortes y ex-Secretario de la UPG) o Miguel Anxo Lores (alcalde de Pontevedra desde 1999) son los más críticos con la integración de la formación en nuevas coaliciones, sea con partidos gallegos o de ámbito estatal, y abogan por una refundación de la misma; los segundos apuestan por la integración dentro de En Marea para no desaparecer de las instituciones de ámbito supramunicipal, defendiendo esta postura el citado antes Xavier Vence o Carme Adán (cabeza de lista por Pontevedra de Nós-CG). Sin duda, los resultados de este encuentro comenzarán a dibujar el panorama de cara a las elecciones.

Dentro de los emergentes, y pese a su enorme éxito el pasado 20D, asoman las dudas dentro de En Marea. Los miembros de AGE (ANova y EU) siempre se han mostrado partidarios de reeditar estas coaliciones para poder sumar fuerzas a partir de unos mínimos tanto nacionalistas como de izquierdas. Sin embargo desde el 11 de Enero, cuando el Sec. Xeral de Podemos Galicia Breogán Riobóo, aseguró “no descartar la concurrencia de Podemos en solitario a las autonómicas” comenzaron las primeras fisuras en la organización morada.

Un sector de la misma, Mar de Fondo; emitía un manifiesto asegurando su descontento con la postura excesivamente nacionalista de la coalición, reforzando la postura de Riobóo. Sin embargo, este se ha visto desplazado esta última semana ya que tras cesar a varios miembros de la dirección de Podemos Galicia, desde Madrid se ha encargado a una gestoria dirigida por el senador García Buitrón (contrario a Breogán, como muchos de los cesados) la dirección hasta la convocatoria de una Asamblea; además de desposeer al Secretario de medios dentro del partido.

Sobre el liderazgo de la candidatura de En Marea de cara a las autonómicas aún hay muchas dudas, ya que los mejor posicionados serían los dos líderes de AGE. Sin embargo, Yolanda Díaz es diputada desde el 20D y Xose Manuel Beiras ha reconocido que su ciclo político está acabado; aunque el resto de dirigentes no lo descartan aún, aunque sea para un cargo similar al de “conseller en cap”. Los otros líderes de más renombre de la formación, los citados “alcaldes del cambio”, han asegurado que se encuentran volcados con su proyecto municipal, por lo que estarían descartados también. No se descarta la aparición de un independiente para el puesto, al estilo de Manuela Carmena.

Ciudadanos se presenta como el partido con menos que perder ya que apenas cuenta con bases ni líderes en la Comunidad, y los que han salido a la palestra han destacado por su torpeza como el ya diputado por A Coruña Antonio Rodríguez, y su representación se limita a 16 concejales en toda Galicia. Su objetivo es entrar sí o sí en el Pazo do Hórreo, ya que son la llave para gobernar del PP en caso de no obtener la mayoría absoluta.

Dentro de los partidos minoritarios, destacar al nombrado ya anteriormente Compromiso por Galicia que ha ido ganando peso sobretodo desde que Rafa Cuiña (hijo del histórico Xose Cuiña, nº2 de Fraga en la Xunta) asumió la alcaldía de Lalín. Pese no participar en ninguna candidatura en las generales, siempre han sido partidarios de una lista única galleguista. Su posición la decidirán en Asamblea como en anteriores ocasiones y dependerá mucho de los movimientos de BNG y Podemos Galicia.

Los próximos meses deberemos estar atentos a varios frentes (negociaciones por el Gobierno, sucesión en Génova, Asambleas de BNG y Podemos Galicia) para poder entender el escenario que se presentará en las elecciones de otoño, donde junto con Euskadi, Podemos podría tocar poder a nivel autonómico por primera vez en uno de los feudos históricos del PP.

Un artículo de Víctor Pérez.