Se acaban de difundir los datos de desempleo de las oficinas de empleo (SEPE), que por primera vez desde la anterior crisis económica sitúa el número de parados por encima de la cota de los cuatro millones (4.008.789).

El mes de febrero del año pasado fue el último de «normalidad», y supuso un descenso del desempleo de casi 8.000 personas. Este año, en cambio, la cifra se eleva en 44.000 más. En el último año completo, el número de desempleados se ha elevado en 762.000 personas.
Por sectores, los más perjudicados por la situación son el de los servicios (que se encamina hacia los 3.000.000 de parados) y el colectivo «sin empleo anterior», que engloba sobre todo a jóvenes que se incorporan al mercado de trabajo. Industria y construcción, en cambio, están aguantando algo mejor.
Hasta que no vuelva el turismo no podremos mejorar las cifras de desempleo. Es lo que tiene depender casi todo el país de ello desde los años 60 por no querer invertir en infraestructuras.