El Tribunal Supremo ruso prohíbe el movimiento LGBT en Rusia

Este jueves, el Tribunal Supremo de Rusia ha emitido una prohibición al movimiento LGBT en el país, clasificándolo como una “organización extremista” a solicitud del Ministerio de Justicia.

La decisión, que entró en vigor de inmediato, se produjo después de una sesión a puerta cerrada que duró cuatro horas y en la que solo estuvieron presentes representantes de la Fiscalía y el Ministerio de Justicia, según informó Zona media news.

La demanda, presentada el 17 de noviembre, alega que el “movimiento social LGBT internacional”, que no existe en realidad, exhibió “diversos signos y manifestaciones de orientación extremista, incluida la incitación a la discordia social y religiosa”. El líder o creador de una “organización extremista” puede enfrentar hasta 10 años de prisión, mientras que los participantes podrían ser condenados hasta por 6 años. Sin embargo, la falta de un “movimiento social LGBT internacional” reconocido en Rusia plantea incertidumbre sobre qué organizaciones se verán afectadas por la prohibición y cómo.

Un grupo de activistas LGBT intentó presentar una defensa creando el ficticio “Movimiento Social LGBT Internacional” para abogar por sus intereses ante el Tribunal Supremo de Rusia. A pesar de esto, se les negó el acceso a la sala del alto tribunal.

Esta no es la primera vez que el Ministerio de Justicia declara como “extremistas” a organizaciones inexistentes, aunque en Rusia existen personas que realmente forman parte del movimiento LGBT, aunque anteriormente no hubiera ninguna organización internacional reconocida. Organizaciones de derechos humanos rusas han instado al Tribunal Supremo a rechazar la demanda, argumentando que calificar al inexistente “movimiento LGBTQ” como extremista podría resultar en la criminalización del activismo y los derechos humanos, así como en el riesgo de persecución para defensores de los derechos humanos, activistas, periodistas y personas LGBT que expresan abiertamente sus puntos de vista. Desde 2013, las autoridades rusas han aprobado regularmente leyes en contra de las personas LGBT.