Calvo dice que los indultos son una facultad que el Gobierno evaluará política y no jurídicamente

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha asegurado este viernes que la concesión de indultos “no pone en solfa una sentencia” y a raíz del informe del Tribunal Supremo que no desaconseja los indultos a los condenados por el “procés”, afirma que la decisión sobre la medida de gracia “no es un debate jurídico, sino una cuestión política que decide” el Ejecutivo.

En una entrevista en Canal Sur TV, Calvo ha dejado claro que “si alguien no entiende que el Gobierno tiene que intentar por todos los medios tomar decisiones que ayuden” a que Cataluña salga del “bucle melancólico y frustrante” que supone “romper el orden constitucional sin que lo puedan conseguir es que no tiene memoria”.

Así, y después de que los magistrados del Supremo se hayan expresado contrarios a conceder el indulto a los líderes del ‘procés’, la vicepresidenta ha insistido: “Son un instrumento que nada tiene que ver con el hacer del Poder Judicial, no pone en solfa una sentencia, no critica, no entra en ese terreno”.

“Los indultos existen en todas las democracias. (…) Indultamos casi cada semana, por razones estrictamente de idoneidad en el campo de la política. Esto no es un debate jurídico.”, ha señalado.

“Cuando se terminen todos los informes, y el ministro de Justicia lo lleve al Consejo de Ministros, tomará una decisión”, que tendrá que ver con la conveniencia, la política y la tranquilidad, la gobernabilidad y la concordia” de este país.

Respecto a Pere Aragonès, que ha vuelto a manifestar su deseo de un referéndum, Carmen Calvo ha recordado que, como dijo el presidente Aznar, tiene derecho a ser independentista y a reclamar lo que estime oportuno. A lo que no hay derecho es a “romper el orden legal”. “En el momento en que intentaron romper el orden legal”, Pedro Sánchez estuvo al lado del gobierno de Rajoy.

Ese apoyo pasado es la legitimidad política que, según Calvo, tiene ahora Pedro Sánchez para tomar las decisiones responsables que deben tomarse según la situación política actual.